Si has llegado hasta aquí es que estás dispuesto a guarrearte las manos. Bueno, lo mejor es ponerse unos guantes de vinilo o nitrilo, el látex se lo come el aceite si tardamos mucho y no queremos mancharnos demasiado.
Una vez nuestro coche llega a la cifra de kilómetros o al tiempo que especifica el fabricante tras el cambio de aceite, toca cambiarlo. Vamos a detallaros como cambiar el aceite del motor de vuestro coche, para aquellos que no les va la facilidad de llevar el coche al taller y que nos lo haga un mecánico.
Primera observación de todas, el aceite es muy contaminante, por eso mismo está prohibido cambiarlo en la vía pública, y si por algún casual la Guardia Civil o alguna autoridad se entera que lo cambiamos en nuestro garaje y echamos el aceite por el desagüe se nos puede caer el pelo y un buen puñado de euros de los bolsillos con destino a las arcas públicas.
El aceite que recojamos hay que almacenarlo convenientemente hasta finalizar la operación y llevarlo al acabar a un punto de reciclaje autorizado. Los puntos limpios de las grandes ciudades suelen tener contenedores para depositar el aceite de motor usado, recomiendo llamar para preguntar si recojen estos residuos antes de ir para evitar un paseo.
El primer paso es vaciar el cárter de aceite. Antes de empezar, hay que tener las herramientas preparadas, normalmente se necesita una llave fija para tuercas hexagonales o una llave allen, las medidas dependen del modelo de nuestro coche. Antes de drenar el cárter tenemos que tener el motor caliente pero con el aceite posado, es decir, unos 8-10 minutos tras haber parado el motor del coche.
También necesitaremos el aceite, es buena idea utilizar el aceite recomendado por el fabricante (suele venir en alguna etiqueta en el vano motor, en los umbrales de las puertas o en el manual) o al menos uno de clasificación equivalente. Aunque al drenarlo tenga buena pinta sin carbonilla y sin restos sólidos, no se debe reutilizar. En algunos modelos también necesitaremos comprar la arandela que garantiza la estanqueidad de la tuerca/tornillo del carter, e incluso a veces se necesita el propio tuerca/tornillo. Con todas estas cosas compradas, toca drenar el aceite.
Es recomendable tener elevado el coche, para tener capacidad de maniobra bajo el coche, para esto no vale con un gato, necesitamos unas borriquetas bien colocadas que aguanten de sobra el peso del coche o un elevador, disponible si alquilamos un box donde tendremos disponibles además herramientas y útiles para nuestro uso. Una vez posado el aceite, pero todavía caliente, hay que colocar un recipiente bajo el agujero del carter donde alojar el aceite cuando caiga. Una vez colocado, cogemos la llave apropiada y retiramos la tuerca/tornillo del carter.
Con el agujero del cárter abierto toca esperar a que se vacíe. Existe una forma alternativa de vaciarlo y mucho más rápida, aunque solo es posible si tenemos la herramienta apropiada disponible. En casi todas las empresas que alquilan boxes la tienen, es la “chupona” o aspiradora de aceite. Metemos la boquilla por el hueco de la varilla del aceite y encendemos la máquina hasta chupar todo el aceite. Fácil, sencillo y para todos los manitas. Solo tiene un inconveniente y es que bastantes restos de aceite se quedan en el fondo del carter y no podemos extraerlos solo a través del tubo de la varilla del aceite.
Una vez vacío, abrimos el tapón de llenado del aceite y echamos el aceite… ¡Que noooo! Primero hay que cerrar el agujero del cárter, para ello colocamos la arandela (nueva si lo especifica el fabricante) en la tuerca/tornillo (nuevo si lo especifica el fabricante) y lo apretamos. Estos tornillos suelen llevar un par de apriete específico que también especifica el fabricante, así que si tenemos una llave dinamométrica a mano podremos hacer el apriete perfecto.
Una vez tenemos el cárter cerradito y listo para alojar el aceite nuevo, tenemos que bajar el coche de las borriquetas o el elevador, abrir el capó y retirar el tapón de llenado del aceite, no tiene pérdida, el que tiene un simbolito de aceite o pone “OIL”. Hay que abrir el tapón despacito, si no hemos esperado suficiente puede que el circuito todavía tenga algo de presión por el calor y podemos hacernos una quemadura a lo tonto o peor aún, puede caerse el tapón en algún recóndito hueco del vano motor.
A la hora de llenarlo no deberíamos tener problema, normalmente las propias garrafas de aceite tienen boquillas que facilitan el llenado y las bocas de llenado son bastante anchas para no poner todo perdido de aceite. Para los que tienen unas manos que parecen pies (me incluyo) o el pulso para robar panderetas, la solución fácil es utilizar un embudo, de esta manera nos aseguramos que no tiramos nada fuera.
¿Y cuánto aceite echo? Pues la cantidad que especifique el fabricante, en los manuales de usuario del coche lo suele poner, normalmente en la sección de especificaciones del motor, allí encontraremos la capacidad de lubricante que tiene el cárter. Hay que tener cuidado para no pasarse ni quedarse corto de esa medida. Una vez hemos echado el aceite y esperado un rato (para que baje al cárter), miraremos el nivel de aceite para comprobar que hemos echado el aceite justo.
Muchos fabricantes recomiendan el cambio del filtro de aceite cada cambio o cada dos cambios del aceite. Esta maniobra suele requerir de herramienta específica, en concreto una llave de cinta o cadena. Sin ella no haremos nada, porque los filtros incluyen un sistema de ajustado automático (para evitar fugas) que hacen que intentar sacar el filtro con la mano sea cosa imposible.
Si optamos por cambiarlo, hay que colocar la bandeja o cacharro donde hayamos vaciado el aceite del cárter bajo el filtro, ajustar la llave de cinta o cadena al filtro y sacarlo girando con cuidado de echar todo el aceite del interior del filtro en la bandeja. Una vez sacado, limpiaremos la zona, colocaremos el filtro nuevo (o el filtrante nuevo) y apretaremos fuerte con la mano. Listo, ya tenemos el aceite y el filtro cambiados.
Un aceite del motor pasado y maltratado que haya acumulado mucha carbonilla puede restar algo de potencia a nuestro coche y cambiar averías, por eso hay que cambiarlo cuando toque, ya sea nosotros o un mecánico profesional. De todas formas, cambiar el aceite cada menos kilómetros de los recomendados tampoco se notará en gran medida, por lo que no hay que obsesionarse con llevar el aceite completamente limpio.
Otros aceites
El coche dispone de otros aceites entre los que se encuentran el líquido de freno, el de la caja de cambios o el del diferencial. El primero (derivado del glicol) lo trataremos en una próxima entrada sobre el mantenimiento de frenos. Los otros dos, normalmente suelen ser compartidos (en vehículos de tracción delantera) porque el diferencial va alojado dentro de la caja de cambios.
Normalmente la valvulina, que así se llama el aceite de la caja de cambios, no se cambia en toda la vida del vehículo, pero si hay que reparar la caja de cambios o ésta es algo especialita (las DSG p.e.) si requiere realizar un mantenimiento correctivo en caso de reparación y predictivo cada cierto tiempo o kilómetros recorridos en el otro caso. Los aceites de la caja de cambios resisten mucho maltrato y suele haber imanes en el cárter de las mismas para recoger las limaduras de hierro que se desprenden de los componentes.
También existen algunas cajas de cambio, normalmente automáticas que cuentan con una varilla para mirar el nivel del aceite, pero en éstos casos la varilla suele estar bastante inaccesible, por lo que se excluyen de los mantenimientos que se puede hacer uno mismo. Además el tapón para drenarlas también suele estar poco accesible y para llenarla necesitaríamos desmontar la caja de cambios.
En el caso de los diferenciales traseros y centrales en las ocasiones que no lleven aceite para toda la vida del vehículo, pueden tener tapones de comprobación del nivel y llenado (como el que vemos en la imagen). Esto suele pasar en camiones y autobuses, en los turismos normalmente no se cambia el aceite de los diferenciales nunca durante la vida del vehículo.
Hasta aquí hemos llegado con los aceites del coche, esperamos haber sido claros y haberos animado a mancharos un poco las manos para ahorrarnos unos euros (aunque yo no lo haría hasta que se me pasase la garantía) en estos tiempos que corren. Se aceptan de buena gana sugerencias y correcciones, eso sí, abran fuego ordenadamente.
Fuentes | Manual de automóviles – Arias Paz, The Automotive Handbook – Bosch
Más información | Marcado aceites de motor (en inglés)
En Motorpasión | Especial mantenimiento del coche