El sueño de Sean Casey, un veterano cazador de tornados, siempre ha sido poder filmar uno en su mismo núcleo; encontrarse con él y ser golpeado, sentirse en el meollo del asunto.
Así que cogió una pick-up Ford F-450 diesel de 1997, sustituyó su cuerpo por una poderosa estructura de acero hecha a base de soldaduras caseras, e incorporó una torreta tipo carro de combate, desde la que se puede ver y filmar todo. El resultado es el Vehículo Interceptor de tornados (TIV). Esperemos que pueda mejorar sus 15 minutos filmados en los últimos siete años.
Vía | AutoWeek