La fotografía es un arte. Cualquiera puede sacar fotos hoy día con una cámara digital (o analógica, que también), pero una cosa es sacar fotos normales y otra hacer buenas fotos de un coche. Día a día vemos en Motorpasión fotos oficiales que rozan el arte, si es que directamente no lo son.
Desde que me dedico a probar coches, he tenido que aprender fotografía por narices. En los primeros coches utilizaba imágenes oficiales que me daban las propias marcas, no tenía ni cámara por entonces (miento, una Casio vieja que las tiraba a 320×240). A veces encontraba el modelo exacto que probaba, otras veces no.
Cuando me hice con mi primer coche “gordo”, el Audi A8, se lo enseñé a un amigo que sacó su cámara de fotos e hicimos muchas tomas. No servían todas, evidentemente, estábamos bastante verdes en ese sentido. Durante mucho tiempo, ese amigo fue el que me hizo las fotos a los coches, y lo hizo encantado.
Poco después de entrar a Motorpasión pasé a encargarme de las fotos, mi problema era la falta de cámara. Me acabé comprando una Nikon Coolpix L11, que cumplió muy buen servicio hasta que se me cayó al suelo. Luego di el salto a las Reflex con la Nikon D60, y esta me obligó a aprender muchas más cosas.
Estas cámaras son las que permiten más juego, pero también hay que tener mejor técnica para conseguir el resultado deseado. Entre las fotos que saco hoy día y las que sacaba cuando empecé noto grandes diferencias. Ahora uso un filtro polarizado, trípode, pienso en velocidad de obturación, encuadres…
Para cubrir mis carencias como fotógrafo, que a fin de cuentas soy un autodidacta, he tirado de retoque digital. Os asustaría saber la cantidad de retoque que tengo que hacer a mis fotos, principalmente por problemas de limpieza (coche/entorno), color o encuadre. Actualmente utilizo GIMP, uFRAW e ImageMagick, todo bajo Linux, no necesito para nada el putoshop.
Los compañeros de Xataka Foto nos dan un buen repaso a los editores de Motorpasión sacando fotos, lo reconocemos. En esta ocasión Manolo Toledo nos acerca algunas técnicas para hacer fotos con resultados muy similares a las de prensa, conocía algunas de las que describe, otras más bien no.
En su artículo veréis unas imágenes excelentes de un BMW 118d tomadas cerca de ¿Gibraltar?, que bien podrían pasar por oficiales. No han salido todas de su cámara así, algunas tienen retoque digital, a veces es simplemente inevitable hacerlo. El resultado es impresionante.
Para hacer fotos artísticas estoy de acuerdo con él, hay que disparar en RAW (bruto) y luego hacer correcciones para dejarlas perfectas. Pero cuando hay que preparar más de 30 imágenes, como solemos hacer en nuestros reportajes, usar RAW puede ser el camino más cercano al suicidio.
¿Por qué? Una imagen RAW, sin tratar, no se ve “tan bien” como la JPEG que saca la cámara. Eso es porque hay que tocar el balance de blancos, exposición, curvas de color, contraste, brillo, saturación, medios tonos… Si dominas todo eso, el resultado es inmejorable, y encima sin pérdida de calidad de imagen.
Pero para ver las imágenes a 1280×1024 máximo, no hace falta partir de calidad basada en TIFF (sin compresión destructiva), basta con JPG a alta calidad si no quieres tirarte horas de tu vida preparando un “carrete”. Pero si quieres hacer una ampliación tipo poster y esbozar una sonrisa viendo tu arte… mejor en RAW.
A los consejos de Manolo quisiera añadir, dentro de la modestia del amateur, utilizar un filtro polarizado (sólo Reflex) para eliminar reflejos de la carrocería cuando no son deseados. Fijaos en la galería del Subaru Impreza 2.0 (sin filtro) y las de el Peugeot 206+ (con filtro). Cambian los detalles carrocería/fondo.
Por otra parte, para sacar imágenes en bajas condiciones lumínicas, o varias iguales (como las de las distintas posibilidades de un maletero), o para tomas en movimiento de calidad, hace falta un buen trípode. El pulso y la velocidad de obturación nos puden jugar malas pasadas. Este consejo es válido para cámaras normales.
Para imágenes en movimiento a media y larga distancia es imprescindible un teleobjetivo de al menos 200 mm de distancia focal, o tendremos que estar asquerosamente cerca y eso no siempre es posible. Esto, obviamente, hablando de Reflex, las cámaras normales no permiten poner otros objetivos.
Os animo a leer el artículo de Manolo y a hacer vuestros pinitos en fotografía digital de calidad en coches. Para no saturarnos, os sugiero que dejéis enlaces a galerías (Flickr o similares) para que podamos consultar vuestras tomas sin llenar esto de enlaces. Un enlace a galería por persona, por favor.
Desde aquí mando un saludo a nuestros compañeros de Xataka Foto, a los que intentaremos hacer un poco más de caso en lo sucesivo, ya que nosotros entendemos más de coches, pero en cuanto a quién pilota más de fotografía, me temo que la discusión no va a llegar muy lejos.
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