Hace décadas pensábamos que en los tiempos que vivimos actualmente estaríamos rodeados de coches voladores, al estilo de los de la película El Quinto Elemento, pero aún queda mucho para eso. Sino que se lo pregunten a Stefan Klein, el hombre que pilotaba el coche volador de la fotografía superior durante un vuelo de pruebas en Eslovaquia.
Klein, cofundador de la compañía AeroMobil que fabrica el coche e ingeniero jefe del proyecto, se encontraba en pleno vuelo de pruebas, a unos 200 metros de altura, cuando algo falló, obligándole a desplegar el paracaídas instalado en el vehículo, que consiguió minimizar los daños de la caída contra el suelo. Según testigos del accidente, el piloto perdió el control del aparato momentos antes de abrir el paracaídas. Afortunadamente, no ha sufrido lesiones de importancia.
El que no ha tenido tanta suerte es el propio prototipo, que a juzgar por las imágenes sí ha sufrido importantes daños. Según la compañía que lo fabrica, su lanzamiento al mercado podría llegar tan cerca como en 2017, aunque quizá después de este incidente decidan dedicarle más tiempo a los vuelos de prueba, por si acaso.
"La detallada información recopilada y la experiencia de este vuelo de pruebas será analizada y los resultados se utilizarán para mejorar el prototipo", afirman desde AeroMobil. "Las pruebas del prototipo actual 3.0 y el desarrollo de más productos seguirá una vez reemplacemos las piezas dañadas", concluye la compañía.