Un soleado día a orillas del Mediterráneo, en Benidorm, nos ha servido para conocer el nuevo MINI Cabrio, un nuevo modelo que llega ya a los concesionarios españoles tomando como base la del MINI 3 puertas.
El nuevo MINI Cabrio es “más coche”, ya que mide 98 milímetros más de largo, es 44 milímetros más ancho y 1 milímetro más alto que su antecesor. Pero no es eso lo único que cambia en este nuevo MINI del cual pretenden vender entre 700 y 800 unidades este año. Te lo contamos.
Lo primero que destaca del nuevo MINI Cabrio es que, como ha ocurrido con el resto de la familia MINI, ha crecido. Lo ha hecho en línea con sus hermanos de gama, la cual sigue teniendo al MINI 3 puertas como el modelo más vendido, seguido muy de cerca por el nuevo Clubman que probamos hace unos meses.
Estéticamente la evolución respecto a su antecesor es evidente. Manteniendo la esencia del diseño inequívocamente MINI, el nuevo Cabrio adopta las nuevas ópticas delanteras y traseras de la familia F56, que son más acordes con un coche más grande como es este.
Su nuevo tamaño con una distancia entre ejes 28 milímetros superior, le sienta de maravilla ya que además de ganar en aplomo y estabilidad en carretera, también le permite disponer de un interior más amplio y confortable tanto en las plazas delanteras como en las traseras e incluso en el maletero.
Manteniendo con la capota cerrada un aspecto muy cercano al del modelo de tres puertas, el nuevo MINI Cabrio dispone de 10 milímetros más de espacio para las piernas en las plazas delanteras y 36 milímetros más detrás, siendo por tanto más utilizable.
Misma capacidad de maletero que el 3 puertas
Como en todo cabrio, hay que prestar especial atención al tamaño del maleteromaletero. Al recurrir a la capota de lona reforzada con estructura portante, el espacio del maletero que han conseguido es exactamente el mismo del que dispones en el MINI 3 puertas, 215 litros cuando la capota está cerrada. Con la capota abierta la capacidad se queda en 160 litros.
Aseguran en la marca que esto supone un aumento de la capacidad de un 25% respecto a su antecesor, y además dispone de un sistema llamado Easy-Load que, moviendo dos soportes manuales en el compartimento del maletero, permite obtener una boca de carga más amplia para meter objetos voluminosos, lo cual se agradece si tenemos en cuenta que los asientos posteriores son abatibles de forma individual cada uno de ellos.
El chasis se ha reforzado para mantener el nivel de rigidez necesario al haber perdido el techo. Y ya que estamos con el techo, vayamos a la capota de lona y su nuevo sistema de apertura completamente automático.
Como novedad, ahora La capota se puede accionar en marcha, una maniobra que se puede hacer con una velocidad de hasta 30 kilómetros por hora. Se abren y se cierran la capota y las ventanillas laterales en 18 segundos, lo cual no es rápido, pero al menos ahora se puede hacer sin detener el vehículo. También se puede abrir o cerrar la capota mediante el mando de apertura remota.
Una vez abierta la capota se recoge justo detrás de las plazas posteriores, quedando visible a la vista, como ocurre en otros modelos de su competencia, como el Volkswagen Beetle. La novedad en esa zona posterior llega porque han desaparecido los arcos antivuelco que antes eran visibles, quedando ahora integrados en el perfil posterior de la carrocería. Estos solo se activan de forma automática saltando en caso de que el coche detecte que estamos sufriendo un accidente.
Siguiendo con la capota de lona, ésta se puede abrir en dos fases, una primera en la que el segmento situado encima de las plazas delanteras se recoge sobre la propia estructura dejando 40 centímetros de apertura, como si se tratase de un techo solar practicable, o bien recogerla completamente y "esconderla" detrás de las plazas posteriores.
La insonorización de la capota es buena, y eso ayuda a que el confort de marcha cuando la llevas abierta no sea muy lejano de la del modelo de tres puertas. Por último, y también como novedad, el MINI Yours permite elegir un diseño de la capota con imagen tejida especial de la bandera Union Jack, una opción bonita, elegante y novedosa que supone un desembolso de 650 euros.
El coche te avisa si va a llover
Uno de los avances más importantes entre la actual generación del MINI y su antecesor se ha llevado a cabo en el aspecto tecnológico. Ahora el MINI, al ser más coche, también permite llevar algunas tecnologías que antes no estaban disponibles, muchas de ellas heredadas directamente de otros modelos del Grupo BMW.
De serie el MINI Cabrio lleva en todas las versiones cierre centralizado, la radio MINI Boost con puerto USB y conexión AUX-In, sistema de control de distancia de aparcamiento Park Distance Control y climatizador, pero como es lógico la lista de opciones es casi infinita.
Entre las tecnologías opcionales disponibles, destacan por ejemplo los faros LED adaptativos, el MINI Head-Up-Display, el sistema de aparcamiento asistido, el control de velocidad de crucero adaptativo, la advertencia de la presencia de peatones con función de inicio de frenado o el asistente de luces de carretera automática.
También hay algunos elementos específicos para el Cabrio, como por ejemplo el sistema Journey Mate con radar de tráfico en tiempo real y advertencia de lluvia. Este sistema integrado dentro del paquete MINI Connected, mediante conexión a Internet tiene información sobre si va a llover en la ruta que estamos haciendo o en la que tenemos marcada en el navegador. En caso necesario nos avisa para que pongamos la capota antes de mojarnos.
Lo que eschamos en falta tratándose de un cabrio, es un sistema de emisión de aire caliente al cuello, como tienen otros coches de la competencia. Es un detalle que sienta muy bien a los descapotables, especialmente cuando se usan más allá del verano.
Tres motores de gasolina y dos diesel
El nuevo MINI Cabrio ya está a la venta en todos los concesionarios españoles de la marca, y llega con una completa gama de motores de gasolina y diésel. En gasolina encontramos tres motores turboalimentados, empezando por el ONE con un 1.2 de 102 caballos, al que le sigue el Cooper con el tricilíndrico 1.5 de 136 caballos. Como viene siendo habitual el tope de gama es el Cooper S, que monta el motor 2.0 de 192 caballos.
Los que quieran una versión más radical y deportiva, tendrán que recurrir al MINI Cabrio John Cooper Works, un coche que equipa el mismo motor que el Cooper S pero llevado hasta los 231 caballos de potencia y con una puesta a punto de chasis y suspensiones mucho más deportiva para los que buscan sensaciones más deportivas si cabe.
En diésel habrá dos versiones, la Cooper D con el motor 1.5 de 116 caballos y la Cooper SD de 170 caballos. Todas las motorizaciones se combinan de serie con caja manual de seis velocidades salvo la Cooper SD, que lleva de serie la Steptronic de seis velocidades, también disponible de forma opcional en el resto de motores.
Una brevísima toma de contacto
Durante la presentación nacional que ha tenido lugar en las cercanías de Alicante, hemos tenido ocasión de conducir de forma muy breve el MINI Cabrio Cooper S, con el motor de 192 caballos y la caja de cambios manual de seis velocidades.
Aunque la ruta ha sido muy corta, sí que hemos podido apreciar algunos cambios respecto al modelo precedente. Uno de los primeros cambios lo encontramos en la regulación de los asientos, que ahora permiten situar la banqueta en una posición mucho más baja que antes.
Esto ayuda a mejorar la posición de conducción y a que la protección frente al viento sea mejor, especialmente cuando, como era el caso, llevas el nuevo deflector de aire posterior que anula las plazas posteriores. En esa configuración, el MINI Cabrio permite disfrutar de la conducción tan característica de los modelos de la marca, aunque por las formas de la carrocería con una parte trasera muy abierta, se cuela más aire en el habitáculo del habitual en otros coches descapotables.
A pesar de haber crecido bastante en cuanto a tamaño acercándose peligrosamente a los cuatro metros de largo, los MINI actuales siguen ofreciendo ese tacto tan cercano al de un kart que tanto gusta a sus clientes. La dirección muy directa, unas suspensiones un poco más duras de lo habitual en el segmento y la agilidad como principal rasgo dinámico, siguen haciendo del MINI Cabrio un coche con el que el placer de conducción está asegurado.
Esta versión Cooper S con 192 caballos, ofrece sensaciones de coche deportivo gracias a unas excelentes prestaciones, ya que acelera de 0 a 100 km/h en 7,2 segundos y alcanza 230 km/h de velocidad punta. Lo mejor que tiene este motor más allá de su tacto y las prestaciones que ofrece, es que los consumos se mantienen bastante contenidos, quedándose en 6 l/100 km en las versiones con caja manual y 0,2 litros menos en las automáticas.
Y ya que hablamos de la caja de cambios, hay que mencionar el funcionamiento de la palanca selectora, que permite meter las marchas sin complicaciones. Cabe destacar que el cambio manual hace la función de doble embrague de forma automática en reducciones, lo cual permite que las marchas se engranen con facilidad y favorece al mismo tiempo la conducción deportiva.
Para poco más nos sirvió la ruta que habían preparado para nosotros en MINI. Bueno, también sirvió para comprobar cómo esta época del año puede ser perfecta para un descapotable como este, ya que con unos agradables 15 grados centígrados de temperatura y el sol radiante, conducir un MINI Cabrio es una experiencia de lo más sensorial.
Precios MINI Cabrio 2016
Potencia | PVP | |
---|---|---|
MOTORIZACIONES DE GASOLINA | ||
ONE | 102 CV | 22.700 euros |
COOPER | 136 CV | 25.200 euros |
COOPER S | 192 CV | 31.350 euros |
JOHN COOPER WORKS | 231 CV | 36.550 euros |
MOTORIZACIONES DIÉSEL | ||
COOPER D | 116 CV | 26.950 euros |
COOPER SD | 170 CV | 34.250 euros |