Mercedes-Benz se ha unido a la fiebre de los patinetes eléctricos con un nuevo modelo que es parte de la submarca EQ. Se trata del E-Scooter, que competirá con los Vehículos de Movilidad Personal que han presentado recientemente otras firmas automotrices como Audi, Hyundai y BMW.
Curiosamente (o no), el nuevo patinete de la marca bávara se presentó con este mismo nombre: E-Scooter, mientras que el de Audi recibió el nombre de e-tron Scooter.
Ni una foto del patinete al completo
En el Salón del Automóvil de Frankfurt 2019, Mercedes-Benz anunció una asociación con la empresa de movilidad Micro, y los dos dieron a conocer un patinete eléctrico que lleva la insignia de estrella de tres puntas.
También presentó de forma muy discreta una gama de artículos para el día a día que incluían auriculares inalámbricos, accesorios para el CLA y este pequeño vehículo.
Lo cierto es que el fabricante no ha dado apenas información de las especificaciones del E-Scooter: no conocemos el peso, la autonomía, la velocidad máxima o la potencia de la batería, aunque sí que ha sido desarrollado junto a la marca suiza de scooters Micro.
"Con una marca compartida con Micro, la estrella de Mercedes y el logotipo de EQ aparecen en el manillar como marca registrada de Electric Intelligence", ha dicho Mercedes-Benz.
La marca de la estrella tampoco ha dado apenas detalles acerca del que será su medio de transporte más asequible. Sabemos de momento que se lanzará a principios de 2020, sin dejar claro en qué mercados, aunque el alemán será con seguridad uno de ellos.
La última incorporación de un fabricante de coches a esta esfera llega en un momento convulso, especialmente en España. La Dirección General de Tráfico está tratando de atajar el limbo normativo y la ausencia de un marco general en el que se encuentran los patinetes eléctricos.
El próximo domingo se producirán manifestaciones simultáneas en las ciudades de Madrid, Barcelona, Sevilla, Málaga, Murcia, Albacete y León para mostrar su rechazo a una normativa que a su parecer les deja indefensos y sin opciones, como la propuesta de la DGT de limitar la velocidad máxima a 25 km/h.