El último coche de competición de Mercedes-AMG se llama Mercedes-AMG GT4 y se acaba de presentar con ocasión de las 24 Horas de Spa-Francorchamps del pasado fin de semana. Se trata de una bestia de carreras basada en el Mercedes-AMG GT R de calle, pero con todo lo necesario para participar en la categoría GT4.
El año pasado la marca alemana ya introdujo el Mercedes-AMG GT3, y este nuevo modelo que busca ampliar el foco a otras categorías de competición, será entregado a los equipos privados que lo adquieran a finales de este mismo año. Y aunque esté basado en un coche de calle, el hermano pequeño del GT3 es un aparato también muy serio para competir.
Aún en proceso de desarrollo, con ingenieros de Affalterbach y pilotos como Bernd Schneider o Jan Seyffarth involucrados en el proceso, este Mercedes-AMG GT4 tendrá que recorrer al menos 30.000 kilómetros en circuito y pasar pruebas de resistencia de 30 horas en el circuito de Lausitzring antes de estar finalmente listo para ser entregado a clientes. Además, tres prototipos participarán como parte del desarrollo en carreras de esta temporada 2017.
4.0 litros V8 biturbo en competición
Bajo el largo capó del GT4 se esconde el 4.0 litros V8 biturbo del modelo de calle, y no el 6.2 litros atmosférico que utilizan el SLS GT3 y el Mercedes-AMG GT3. En función de la congfiguración, puede alcanzar 510 CV y un par máximo 600 Nm. Además, el bloque se combina con una transmisión secuencial de competición (transaxle), de accionamiento neumático y seis velocidades.
Como recordaréis, el GT R de calle ya incorpora un sistema de control de tracción con once modos a elegir por el conductor, y esta gestión electrónica se ha llevado también al GT4 de carreras, aunque convenientemente adaptada. Además, la suspensión de doble triángulo en ambos ejes incorpora amortiguadores ajustables, el ABS es también ajustable y las llantas de aleación ligera son de 18 pulgadas.
La aerodinámica es también un punto importante, y es que el GT4 recibe un kit de carrocería desarrollado en el túnel de viento, con un alerón trasero completamente ajustable en función de las necesidades para cada circuito o un splitter frontal que reduce la fuerza ascendente que se genera en el eje delantero.
Por supuesto, el peso del conjunto es un aspecto clave en un coche de carreras, por lo que la marca de Affalterbach ha fabricado el chasis y la carrocería combinando aluminio y carbono. El capó o el splitter frontal están hechos de material compuesto con fibra de carbono, mientras que los aletines delanteros o el eje de transmisión están construidos con carbono.
En materia de seguridad, el coche cuenta con una jaula antivuelco de acero de alta resistencia, célula de seguridad de fibra de carbono con homologación FIA, una trampilla de seguridad en el techo o un sistema de extinción de incendios. El habitáculo, además, incorpora columna de dirección y pedalera ajustables, botones retroiluminados en el volante, e incluso puede equipar aire acondicionado en opción.
Plataforma para nuevos equipos o pilotos
Mercedes-AMG confía en que el crecimiento en Europa de la categoría GT4 seguirá aumentando en los próximos años, con más y más competiciones que den cabida a este tipo de coches. Actualmente pueden competir en las Blancpain GT Series asiáticas, el Pirelli World Challenge americano, las series VLN en Nürburgring, las 24H Endurance Series o la mítica prueba de las 24 Horas de Nürburgring, entre otras muchas.
"El segmento de los GT4 se está haciendo más y más popular. La idea de los coches basados en modelos de producción es un factor importante, en especial cuando quieres iniciarte en competición como equipo o como piloto", afirma Tobias Moers, máximo responsable de Mercedes-AMG. "Tras nuestros logros en GT3, la competición GT4 es el siguiente paso lógico para ampliar nuestra oferta de carreras-cliente", concluye el alemán.
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