Una de las señas de identidad del Mercedes-AMG C 63 es la presencia de un V8 bajo su capó. En la primera generación fue de tipo atmosférico y en la actual cuenta con la ayuda de dos turbos. Pero para la próxima generación, el Clase podría decir adiós al V8 y acoger ahora un 4 cilindros turbo híbrido asociado a la tracción integral.
El V8, en los últimos años, ha sido la piedra angular de los modelos AMG. Y en el Clase C ha sido uno de sus puntos fuertes como versión de lujo y prestacional. La primera generación equipaba un V8 de 6.2 litros atmosférico similar al del SLS.
La segunda generación adoptó el V8 4.0 litros turbo que pueden equipar casi todos los AMG (salvo los Clase A, CLA y GLA). Pero según cuentan en Autocar, la próxima generación de Mercedes-AMG C 63 adoptaría el 4 cilindros turbo que estrenó el Mercedes-AMG A 45 4Matic.
Se trata de un motor de reciente desarrollo y emparentado con el 6 cilindros en línea M256. Es un propulsor que forma parte de la familia de motores modulares desarrollados en torno a cilindros de 500 cc cada uno.
Esto hace que se puedan crear motores de 3 cilindros de 1.5 litros y 4 cilindros de 2.0 litros, como el del nuevo Mercedes-AMG A 45 4Matic y AMG A35 4Matic. Además, son motores que ya han sido desarrollados para integrar una hibridación suave de 48 V.
Al parecer sería un sistema mild hybrid el que permitiría al futuro “C 63” alcanzar los 510 CV del AMG C 63 S actual. En los modelos mild hybrid, como el Mercedes-AMG CLS 53 4Matic+, el motor de arranque/alternador del sistema aporta hasta 22 CV y 250 Nm de par motor.
Además de abandonar el V8, el futuro C 63 estrenaría además la tracción integral 4Matic+. Aunque suponemos que sería similar a la del AMG E 63 S 4Matic+ y dispondría de un “drift mode” que bloquearía el sistema en tracción trasera.
El V8 dentro del Clase C es tan emblemático (de hecho, comenzó con el primer C43 tipo W202) que esta decisión ha causado ciertas tensiones en el seno mismo de AMG. Como lo explica Lawrence Allan (periodista en Autocar) en un tuit, el propio CEO de AMG, Tobias Moers, habría salido de la sala del consejo de administración en signo de protesta.
Pasión vs razón
La pasión nos dice que un AMG Clase C sin V8 no es un auténtico AMG. El empuje, la fuerza bruta y el sonido que producen son parte esencial del coche. Pero al mismo tiempo, la razón y las normas nos dicen que si Mercedes quiere cumplir con las normas anticontaminación, no queda otra que recurrir a un motor de menor cilindrada y a la hibridación.
De hecho, la mayor parte de la inversión en I+D en motores por parte de Daimler, ahora que tienen todos los motores de recién desarrollo y pueden estar en el mercado 20 años o más, se centra en la hibridación y la electrificación de esos motores así como mejorar su eficiencia.
De momento, aún quedan unos años para poder hacerse con un AMG C 63 con V8, pues este nuevo modelo con motor de 4 cilindros no llegaría al mercado hasta 2022.
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