Estas empresas se comprometieron a inyectar otros 650 millones de euros para reflotar la compañía, e incluso hacerla rentable. Pero GM no está dispuesta a que los chinos se queden con tecnología desarrollada bajo su paraguas, protegida mediante propiedad intelectual, y podrían vetar esta venta.
Cuando Volvo se vendió a Geely por parte de Ford, ya se incluyó una letra pequeña para que Geely no pudiese asumir propiedad intelectual sobre los desarrollos que Ford había pagado de su bolsillo. La historia se repite, y es muy lógico, porque encima de *****, no van a poner la cama (con perdón de la expresión).
Un portavoz de GM ya ha advertido que se opondrán a cualquier decisión contraria a sus intereses en cualquier lugar del mundo. Si los chinos quieren quedarse con Saab, no podrán quedarse con tecnología de General Motors. A día de hoy, Saab utiliza bajo licencia tecnología de General Motors, porque se desarrolló cuando estaban juntas.
Fuente | Sverige Radio (en sueco), Automotive News
En Motorpasión | ¡Saab caerá en manos chinas!