Hay nueva batalla legal en la esfera automotriz, y esta vez afecta al complicado estreno del nuevo coche eléctrico propiedad del gigante chino Geely, el Polestar 2. De momento la marca ha tenido que llamar a revisión a la mayoría de vehículos entregados hasta la fecha a nivel mundial debido a problemas en el sistema eléctrico.
Ahora, sus ventas se han detenido durante varios meses en Francia después de que Citroën haya denunciado que el logotipo de Polestar y el suyo son tan parecidos que puede crear confusión. La Justicia le ha dado la razón en parte al fabricante francés, y aprecia similitudes también con el emblema de DS.
Lucha de logos
Según explican los medios franceses, ya no es posible configurar en Francia el Polestar 2 "debido a restricciones territoriales en el uso de las marcas francesas n° 016898173 y n° 01689532".
Tras varios comentarios de internautas que apuntaban a la similitud entre la estrella polar de la marca 'sueca' y los chevrones, Citroën decidió remitirlo a la justicia en julio de 2019.
Esta dictaminó que efectivamente "la empresa Polestar Performance ha dañado la reputación" de ambas marcas francesas, aludiendo a Citroën y a DS, matizando sin embargo que existe similitud, pero no al nivel que indica Citroën.
Tras el fallo, Polestar deberá pagar una multa de 150.000 euros por daños y perjuicios y además dejar de comercializar el logo en Francia -y por tanto los modelos- durante seis meses.
Polestar ya ha comenzado la producción de su modelo 100 % eléctrico en China y se esperaba que llegara a Francia a principios de 2021 con un precio de partida de 59.800 euros. Se fabrica en China desde marzo, y sus primeras entregas no han llegado con buen pie.
Llamada a revisión de más de 7.700 unidades
Según ha comunicado la propia marca, Polestar ha iniciado una llamada a revisión voluntaria y una campaña de actualizaciones para los vehículos Polestar 2.
Por un lado, se ha detectado un mal funcionamiento en los inversores de potencia, encargados de transformar la energía almacenada en la batería en la potencia requerida por los motores eléctricos. Hay 4.586 vehículos a nivel global afectados por este posible fallo.
Por otro lado, se llevarán a cabo una revisión del calentador de refrigerante de alto voltaje (HVCH). El HVCH es responsable de la climatización del habitáculo y de la batería de alto voltaje. Según ha explicado la firma, procederán a reemplazar las piezas defectuosas. El número total de vehículos afectados en este caso es de 3.150 unidades.
A partir del lunes 2 de noviembre, los clientes afectados comenzarán a ser contactados por correo electrónico y se les notificará sobre los problemas, las soluciones y los próximos pasos.
Adicionalmente, el software de todos los vehículos se actualizará para que sean compatibles con las próximas actualizaciones Over-The-Air. La llamada a revisión no afecta a EEUU, Suiza o Canadá, puesto que allí aún no han comenzado las entregas.
En Europa, empezaron a entregarse las primeras unidades en verano, y de momento no hay noticias acerca de cuándo llegará a España.
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