Completamente renovado, el Honda Jazz encara su tercera generación presentándose en el inminente Salón de París. Versatilidad, un interior práctico y soluciones de almacenaje componen la carta de presentación del subcompacto, que hereda desarrollos vistos ya en sus hermanos de gama: desde la posición central del depósito de combustible hasta los Honda Magic Seats.
Aumenta en dimensiones, con una longitud que crece 15 mm y una batalla que es ahora 30 mm mayor, lo que redunda en un mayor espacio disponible en el interior. Cuenta asimismo con un nuevo sistema de suspensión y, por supuesto, con motores Earth Dreams. En este caso, hablamos de un propulsor 1.3 i-VTEC conectado a una nueva transmisión manual de seis relaciones que sustituye a la anterior, de cinco marchas, y la opción de tener cambio automático CVT.
Del aspecto exterior, podemos hablar de compacidad y de estilo común con la línea que ha desarrollado Honda en toda su gama. La proporción de formas es convincente y también el giro que ha dado el Jazz hacia una estética más robusta y decidida, una estética que se apoya en detalles como las parrillas y las bocas, los nervios marcados o los alerones, que ya son una constante.
El nuevo frontal se integra de forma natural en la línea general de coche del segmento B que exhibe el futuro Jazz, mientras que la zaga evoca las soluciones que ya hemos visto en los recientes lanzamientos de la casa, desde el CR-V, pasando por el Civic hasta desembocar en el HR-V, que junto con el Honda Jazz 2015 se dejará ver a principios de octubre en la cita parisina. Ya en verano de 2015, el nuevo Honda Jazz comenzará su vida comercial.
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