Según varios medios chinos, un coche con tecnología de levitación magnética (o 'maglev') acaba de superar con éxito sus primeras pruebas en una autopista del este del país asiático, donde ha conseguido elevarse a 35 mm de la superficie.
El vehículo, de 2,8 toneladas de peso, ha sido desarrollado por estudiantes de la Universidad de Jiaotong (Chengdu, China) y basa su principio en la misma tecnología que mueve a los trenes magnéticos asiáticos como el ferrocarril “Xingoo” presentado el pasado mes de junio y que va “boca abajo”.
Más allá de la gran pantalla... ¿o no?
Running in the air! A maglev car conducts a road test in China's Jiangsu pic.twitter.com/Dsu9i5FaFG
— China Xinhua News (@XHNews) September 8, 2022
Lexus ya creó en 2015 el monopatín volador con el que soñábamos desde que vimos a Michael J.Fox con el suyo en la saga de ‘Regreso al Futuro’.
Un año después Goodyear se imaginó el curioso Eagle-360 como posible solución a algunos de los problemas que podía presentar la conducción autónoma del futuro (al menos, como se veía entonces): hablamos de un neumático esférico que funcionaba conectado por levitación magnética.
Pero hasta ahora -o al menos fuera de la gran pantalla-, el concepto de levitación magnética aplicado al transporte de pasajeros ‘estaba reservado’ a los trenes. En la actualidad, China es líder en ese campo, cuyos primeros avances significativos se dieron en 2018.
Entonces el gigante asiático ya anunció que estaba probando un tren de levitación magnética capaz de alcanzar los 1.000 km/h, pero no fue hasta 2021 cuando realmente puso en marcha el proyecto de uno de los transportes terrestres más rápidos del mundo: un tren de alta velocidad “flotante” capaz de alcanzar los 600 km/h y de recorrer los casi 1.200 km que separan Pekín y Shanghái en apenas dos horas y media.
No contentos con hitos como estos, los investigadores chinos también creen que el campo de la levitación magnética se puede aplicar en los coches, y solucionar así algunos de los problemas de tráfico que tienen muchas de las ciudades más pobladas -y atestadas de vehículos- al otro lado del mundo.
Para probar su teoría y tratar de convencernos de las ventajas de este tipo de coches respecto a los coches de combustión (entre las que citan mejores prestaciones o menor consumo y desgaste), los investigadores de la Universidad de Jiaotong han probado un total de ocho prototipos -incluidos “cinco eléctricos” aunque no especifican cuáles- en un tramo controlado de autopista.
Aunque como cabía esperar, no han trascendido todos los detalles de dichas pruebas, los desarrolladores del coche han asegurado que “algunos de esos coches superaron los 200 km/h”, y afirman que varios incluso llegaron a los 230 km (prácticamente el doble de la velocidad máxima permitida en estas vías en China).
Pero sin duda lo más llamativo de lo publicado acerca de estas primeras pruebas con coches que levitan es al menos uno de estos coches de pruebas “consiguió elevarse 35 mm sobre el asfalto”.
¿Cómo? Básicamente, según los investigadores son coches que llevan instalada una matriz con electroimanes fijos en la parte inferior del coche. Enfrentados, llevaban una serie de raíles conductores (que luego fueron retirados) instalados a lo largo de un tramo de carretera de apenas 8 km de longitud.
"El desarrollo de los vehículos de levitación magnética es nuestro objetivo", dijo el profesor Deng Zigang tras los ensayos. En las pruebas se apreció que, a pesar de la levitación, el coche sufrió oscilaciones que le llevaron a tocar el suelo con las ruedas en parte del recorrido.
Pese a estos primeros fallos, el profesor Zigang y su equipo continuarán con el desarrollo de vehículos con tecnología de levitación magnética.
Para ello cuentan con el visto bueno de algunas entidades como la autoridad en materia de transporte de la provincia de Jiangsu, quien se encargó de organizar estas pruebas piloto y que tiene entre sus objetivos “estudiar el diseño de carreteras y las medidas de seguridad adecuadas en caso de conducción a altas velocidades con nuevas tecnologías de propulsión alternativas” a los motores de combustión.
Es muy pronto para hablar de que este tipo de vehículos puedan llegar a ser una alternativa real a los motores de combustión como afirman los investigadores que pretenden.
Además, nos asaltan unas cuantas dudas en torno a su funcionamiento, por no hablar de qué pasaría por ejemplo si uno de estos coches "va levitando" a gran velocidad y topa con un obstáculo.
Lo cierto es que la primera vez que oímos hablar de los trenes que levitan también nos pareció algo muy lejano, como de ciencia ficción. El tiempo dirá. De momento la información es escasa y los primeros prototipos parecen más propios de una 'Blade Runner' muy primitiva que de una realidad factible.