Gary Andersson, prestigioso diseñador conocido fundamentalmente por crecer a la sombra de Brabham y ser el responsable de casi todos los monoplazas Jordan de la etapa inicial, considera que Ferrari hizo uso el pasado fin de semana de esa combinación de palabras tan malsonantes en la Fórmula 1: órdenes de equipo. Según el ingeniero irlandés, todo estaba preparado para acabar la carrera con un doblete en el que Kimi Raikkonen sería el piloto que subiría a lo más alto del podium.
El motivo de la sospecha: "La forma en que Raikkonen superó a Massa tras la primera ronda de paradas en boxes me hace sospechar que Ferrari lo había planeado así desde el principio". De ser cierto, implicaría que la Scuderia vuelve a gestionar las carreras como en la etapa Schumacher, con uno de los dos pilotos en una clara posición de número 1. Pero yo creo que en Malasia sabían que ganaría Kimi, pero no estaba planificado. El mismo Anderson añade unas declaraciones que, aunque no se haya comentado demasiado, a mi me sorprendió bastante también en carrera: "Para mí, el momento clave de la carrera en Malasia fue la primera curva, cuando Raikkonen demostró ser lo suficientemente inteligente como para no colisionar con Massa. Kimi siempre tuvo la carrera en mente".
Efectivamente, la salida de Kimi desde la segunda posición fue infinitamente mejor que la de Massa desde la pole, pero el finlandés decidió no jugársela con su compañero de equipo en la primera curva, seguramente consciente de que iba más cargado que el brasileño y lo pasaría fácilmente en boxes. Con más carga de combustible, Kimi aguantó en todo momento el ritmo de Massa en el primer stint, y al más puro estilo Schumi, apretó cuando era necesario, culminando un fácil adelantamiento en su primera parada.
Pero la demostración de Kimi continuó cuando una vez volvió a pista en cabeza, empezó a abrir hueco respecto a su compañero de equipo, que en sus intentos por no quedar en evidencia frente al ritmo del finlandés, cometió el conocido error de pilotaje. Así que para mí, ni órdenes de equipo ni historias: Kimi tenía en Malasia un ritmo claramente superior al de Massa, y por eso se llevó la carrera sin despeinarse.
Vía | F1-Live
