Impresionante la carrera que protagonizó ayer Mika Hakkinen ayer en Mugello. Hakkinen partía desde la décimoquinta posición de la parrilla después de que la clasificación estuviese dominada por los tres Audi de Mattias Ekstrom, Tom Kristensen y Martin Tomzyck, y la verdad es que viendo lo que ocurrió el sábado, poco podíamos imaginar más allá de que los Audi tenían las de ganar. Lógicamente.
Pero no, Hakkinen terminó por delante de Mattias Ekstrom a escasas tres décimas de segundo, y por delante de Paul di Resta, que con su AMG Mercedes C-Klasse de 2005 vuelve a dar la nota en una carrera del DTM. Además de que el circuito sea el más largo de la temporada, las temperaturas que soportaron ayer los pilotos y las mecánicas no eran moco de pavo. La clave de la victoria de Mika Hakkinen fue una segunda parada en boxes temprana acompañada de un oportunísimo Safety Car, que lo puso en condiciones de obtener la victoria, como así fue finalmente. Una noticia estupenda porque personalmente es un piloto que admiro muchísimo, aparte de que (aunque sobre decirlo) me parece muy bueno técnicamente, hablando de pilotaje. Su resumen, así en titular, es "Quien no se rinde obtiene recompensa".
Vía | DTM