Chapuza. Es la única palabra con la que se puede definir el nuevo reglamento técnico de la Fórmula 1. La FIA presentó este jueves la normativa que regirá en el mundial a partir de 2026, y el escándalo ha tardado poco en aparecer. Incluso dos equipos amenazan con irse del mundial.
La FIA ha publicado el reglamento sin haber llegado a un acuerdo total con los equipos, que ahora están muy preocupados con la implementación de la aerodinámica activa. Además, la nueva Fórmula 1 no tendrá DRS, pero a cambio parece que habrá un nuevo sistema más ridículo aún que puede convertir el mundial en algo dantesco.
La FIA quiere cambiar adelantamientos por rebases capando el motor al coche de delante
El nuevo reglamento técnico no ha caído de pie en la Fórmula 1. La FIA ha anunciado lo que aún no se sabía de cómo serán los coches a partir de 2026. Monoplazas un poco más estrechos, algo más cortos, menos pesados y con neumáticos no tan anchos. Pero no es ahí donde está el foco de la polémica.
Al parecer, es la aerodinámica activa lo que ha puesto en pie de guerra a los equipos de Fórmula 1. La FIA publicó el nuevo reglamento sin tener la aprobación total de las escuderías, y poco después los diez equipos han enviado a un representante técnico a reunirse con la FIA para exponer sus dudas.
El caso más extremo es el de dos equipos, cuyos nombres no se han revelado, que incluso estarían amenazando con abandonar la Fórmula 1 si este reglamento técnico sigue adelante. Los rumores apuntan a Red Bull, que abandonaría la Fórmula 1 retirando a sus dos escuderías del mundial. Una situación preocupante.
A los equipos les inquieta que la nueva aerodinámica activa, implementada en los dos alerones, no se activa por el piloto, sino por un software, lo que podría ser peligroso. Además, creen que es inabarcable enrolarse en algo tan delicado como la aerodinámica activa teniendo un techo presupuestario tan bajo.
Esto es lo que preocupa a los equipos, pero los aficionados también tienen sus buenos motivos para estar indignados con el nuevo reglamento. Una de las novedades, generalmente bienvenida, es que el DRS desaparece. Pero a cambio la Fórmula 1 pretende implementar algo muchísimo peor que convertiría las carreras en algo dantesco.
— Formula 1 (@F1) June 6, 2024
Y es que la Fórmula 1 quiere capar la potencia de los coches que tengan detrás a otro en "distancia de adelantamiento". Concretamente, lo legislado es cortar la parte eléctrica de motor a partir de los 290 km/h, recortando 7 CV por cada km/h en que se supere esa velocidad. Se podría llegar a perder incluso 340 CV de potencia llegando a los 337 km/h.
Dicho de otro modo, veríamos coches prácticamente parados en mitad de las rectas, desaparecerían por completo las luchas en pista y tan solo veríamos rebases de autopista a velocidades ridículamente diferentes e incluso peligrosas. Por estrategia, hasta podríamos ver a pilotos prefiriendo no adelantar hasta la última vuelta.
Lo peor es que esto no es una idea, sino un reglamento ya redactado y publicado por la FIA que debería entrar en vigor en 2026. La muerte de la Fórmula 1 escrita negro sobre blanco.