No lo dudaba. Todo lo que le hicieron pasar a Sébastien Ogier durante la última prueba del Mundial de Rallyes debía de tener alguna recompensa. Y es que a un piloto siempre se le hace difícil aceptar órdenes de equipo que claramente le perjudican. Jordania fue un claro ejemplo de esto hecho ya que para favorecer a Loeb obligaron al piloto del Citroën Junior a penalizar y finalmente a salir por delante del propio Loeb para limpiarle los tramos.
Pero como ya os he dicho, todo sacrificio tiene su premio, y sin duda en esta ocasión le ha valido la pena a Ogier. El francés disputará el Rally de Nueva Zelanda, algo que antes de empezar la temporada no entraba en los planes del equipo Junior. Es más, se les ha visto el plumero ya que Kimi Raikkonen no irá a la prueba neozelandesa, siendo Sébastien el único representante del equipo.
Sí, es cierto, Sébastien [Ogier] estará en Nueva Zelanda, pero no tenemos la confirmación respecto a Kimi. No lo creemos, probablemente sólo tengamos un coche. Creo que es seguro al 80 por cien que Kimi no esté. Decidimos que Sébastien fuera a Nueva Zelanda después de Méjico debido al presupuesto. No teníamos previsto ir antes de eso, pero ahora hemos encontrado algunos patrocinadores y podemos.
¿Inyección de ingresos? ¿Nuevos patrocinadores? Me parece que en esta ocasión no engañan a nadie y los únicos ingresos que han tenido son gracias a la victoria de Loeb en Jordania.