Alguien podrá tacharme de carcamal por este post, pero lo cierto es que pensando en todo lo que se ha vivido en los últimos tiempos en la F1, en cómo ha cambiado este deporte y sus planteamientos, y en cómo era antes incluso de nacer yo mismo, la pregunta que hago en el título me vino a la mente hace unos minutos.
¿Se ha perdido el respeto a la F1 y a los pilotos que compiten en ella? Yo creo que hoy en día, ningún piloto podría levantar las pasiones que levantó en su momento, por ejemplo, Gilles Villeneuve. Un piloto igual de agresivo, con ese estilo peculiar, y con los resultados que tuvo, pasaría desapercibido, e incluso sería duramente criticado (como le pasó a Juan Pablo Montoya). El problema creo que está, básicamente, en lo mal acostumbrados que estamos en España (y parece mentira), cuando tenemos un piloto que puntúa cuando quiere, y ya no valoramos la esencia de la Fórmula Uno. Hace muchos años, Chris Amon dejó una frase para el recuerdo, que creo que si la pensamos bien, nos ayudará a entender qué era la F1, y qué no es.
<blockquote><font size="4"><em>"Me faltó fortuna para ganar un gran premio, pero la tuve para retirarme vivo."</em></font></blockquote>
Afortunadamente, la F1 no es tan extrema como cuando muchos pilotos fallecían en las pistas, y evidentemente no echo de menos este hecho. De todos modos, parece que no nos damos cuenta de que los pilotos se mueven en esas cajas con ruedas a más de 250 km/h y en situaciones de auténtico riesgo. Y muchas veces exigimos muchas cosas que se pueden hacer en un scalextric, pero ojo a la hora de hacerlo en la vida real.
Con la frase que escribí arriba sí que podemos comprender exactamente el alcance que tenía para ciertos pilotos el hecho de estar en la Fórmula Uno. Y ganar un Gran Premio. En aquella época, correr era una filosofía de vida, y para muchos, bastaba con estar entre los 30 elegidos para haberse realizado. Y el público lo valoraba en su justa medida. Chris Amon no ganó ningún GP, pero es uno de los pilotos más conocidos de la historia de este deporte. ¿Quién conocerá a Button dentro de 30 años?
Este tema da para mucho.