Durante el Test-Day celebrado el pasado domingo en el trazado de La Sarthe, muchas fueron las miradas puestas sobre la parte trasera del Porsche 919 Hybrid. Tal y como pasara en la Fórmula 1 hace unos años, la flexibilidad de ciertas piezas hace que se ponga en entredicho la legalidad del nuevo LMP1 de Weissach.
La parte concreta en la que hay dudas es la parte final del capot. Y es que con la presión de un único dedo, se podría hundir la carrocería. Pero más allá de pruebas, las fotos habrían dictado sentencia. Y es que en parado, el perfil del Porsche 919 Hybrid quedaría enrasado con el resto de la carrocería mientras que a altas velocidades esta zona se hundiría por la fuerza ejercida por el viento mejorando el agarre aerodinámico del prototipo.
Sea como fuere, para Toyota y Audi esto no ha pasado desapercibido y esperan que el ACO se pronuncie. Al igual que pasa en la Fórmula 1, la reglamentación de la resistencia prohibe la existencia de partes móviles que mejoren la aerodinámica de los vehículos.
Vía | Racecar Engineering