El rumor está en el aire. Renault podría estar pensando en vender su escudería de Fórmula 1 con efecto inmediato. Un bocado como el Crashgate es difícil de digerir, y más para una escudería que no está viviendo una época dorada. En el pasado, McLaren-Mercedes se superpuso al caso de espionaje con una multa de 100 millones de dólares incluida, pero eso no parece que vaya a ser el camino de Renault.
La marcha de sus principales patrocinadores (aunque antes del Crashgate ya se supiera que ING dejaría la escudería al final de temporada), y su dinero, la sanción a Flavio Briatore y Pat Symonds (corazón y pulmón de la estructura), Fernando Alonso camino de Ferrari, una temporada para olvidar…demasiado. Ya lo dijo en su momento Carlos Ghosn. La presencia de Renault en la Fórmula estaba supeditada a los éxitos, y con todo esto, de victorias y podios es de lo que menos se ha hablado en Renault.
Aunque la desaparición no sería total. Renault seguiría ligada a la Fórmula 1 como fabricante de motores, tarea que le reportó muchos laureles a mediados de los 90. De la mano de Williams y Benetton vivió los mejores momentos de la marca en el Gran Circo.
Ahora es el momento de rumorear sobre los posibles interesados en adquirir la escudería. Ecclestone, que últimamente tiene la lengua muy suelta, afirmó durante el pasado Gran Premio de Brasil que había hablado con una persona muy interesada en comprar un equipo. A esa persona ya la habrían puesto nombre y bolsillos: Gerard López con el dinero de la empresa de telecomunicaciones rusa Megafon. El que se tiene que estar tirando de los pelos es Robert Kubica. El polaco llegó a Renault huyendo de la espantada de BMW-Sauber y ahora se podría encontrar con todo este pastel.
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