Y no es una chulería, sino que lo dijo porque le pasó de verdad. Desde que se apagaron las luces del semáforo que marcaban el inicio de la carrera, el piloto finlandés no se pudo comunicar en ningún momento con boxes. Esto tiene como consecuencia que en ningún momento le indicaban el estado de carrera por radio ni podía establecer una estrategia de carrera diferente a la planeada. Únicamente era avisado mediante los carteles desde el pit lane, que a la velocidad con que pasan los pilotos, es casi imposible de adivinar.
Según ha asegurado, a falta de 10 vueltas perdió la concentración, lo que le propició malas negociaciones de las curvas (explica que tomó la curva tres demasiado abierta), así como una bajada de ritmo considerable. Ahora todos podemos explicar el porqué de la reducción de distancia de Fernando Alonso con Kimi en las últimas vueltas, que coincidió con el adelantamiento a Lewis Hamilton en boxes.
Vía | El Mundo