Su experiencia en las carreras es prácticamente nula, y hasta ahora no tenemos noticia de que las siga, pero el rojo Ferrari lleva en su corazón desde hace una década y media. Marco Mattiacci ha sido el elegido para sustituir a Stefano Domenicali y desde ayer asume una de las funciones soñadas por gran parte de los empleados del departamento deportivo de Ferrari.
Nació en Roma en 1972 y muy pronto, en 1989, comenzó su andadura en el mundo del automóvil, trabajando en Jaguar después que estos se fusionaran con Ford. Estudió Económicas en la Universita’ La Sapienza di Roma y puede presumir de haber tenido un comienzo estelar en el mundo del automóvil, pues tras pasar por distintos departamentos empresariales de Jaguar se unió a Ferrari.
Primero se encargó de las ventas en Sudamérica, luego de la red de distribución en Oriente Medio y posteriormente cumplió funciones en las redes de Finlandia y Rusia. Tras ser el líder del relanzamiento de la marca Maserati en América, Mattiacci se encargó del mercado chino, japonés y de la región del Pacífico, todo un reto que concluyó con el nombramiento en el cargo que ha ocupado hasta estos días, el de CEO de Ferrari en Estados Unidos.
Mattiacci ha declarado su amor por Ferrari en muchas ocasiones y está bien considerado dentro de la empresa. Incluso fue reconocido con el premio al ejecutivo del año de la industria automovilística por su liderazgo en 2012. Estas cifras y sus veinte años de experiencia le convierten en un experto del management, las finanzas y el mundo empresarial... ¿pero es eso lo que necesita tener el team principal de un equipo de F1? Mattiacci dejará de lado sus trajes y corbatas para vestirse de rojo, con zapatillas de deporte y sentarse en un muro cada uno o dos fines de semana. Cuenta con la confianza de Luca Cordero di Montezemolo, lo que ayudará, pero aún no sabemos si será suficiente.
Quiero desearle todo lo mejor a Marco Mattiacci; me consta que es un gerente muy respetado y que conoce bien la compañía. Ha aceptado con entusiasmo este reto
Lo que este nuevo dirigente tendrá que sacar a relucir sobre todo es el carácter que le ha faltado a Domenicali durante todos estos años para liderar un equipo que hace un lustro que no celebra un título. Su experiencia empresarial será importante en ese sentido y el servirse de James Allison como mano derecha, por ejemplo, será útil en el aspecto deportivo. Desde este fin de semana, en el GP de China, comprobaremos qué tal funcionan los cambios en la Scuderia. Esperemos que bien, aunque en lo deportivo parece que poco se puede hacer tras este pobre inicio de temporada...