Nubes negras acechan al futuro de Epsilon Euskadi. Según informa en la jornada de hoy el periódico El Correo, las cajas, Vital y Kutxa, han rechazado un retraso en el pago de los distintos créditos concedidos a Epsilon Euskadi (que ascienden a 18,6 millones de euros más los intereses) y también han declinado conceder un nuevo crédito de un millón cada una.
A pesar de las subvenciones (6,5 millones de euros) y de los distintos créditos (40 millones), En los últimos tres años, Epsilon Euskadi presenta unas perdidas de 8 millones de euros. Y lo peor de todo es que a Joan Villadelprat se le acaba el tiempo.
Si en cuatro meses encuentra a un inversor que sea capaz de inyectar suficiente capital para sanear las cuentas o si en ese tiempo no llega a un acuerdo con los distintos acreedores podría tener que declarar la quiebra. En ese caso, un juez asignaría un administrador concursal.
Lejos, muy lejos queda el proyecto de Epsilon Euskadi en las 24 hora de Le Mans con los ee1, o los intentos de llegar a la Fórmula 1. Sin dinero y apoyo, cualquier escudería, por mucho nombre y muchos grandes profesionales que haya detrás, está condenada al fracaso.
Vía | El Correo (Gracias a Borja Huidobro por la pista)