Está claro que una de las máximas atracciones de la presente edición de las 24 Horas de Le Mans, y por lo tanto de la categoría LMP1, será la que se espera sea una cerrada lucha por la victoria entre los Peugeot 908 HDI y los Audi R10 TDI. La batalla de los diesel por la gloria en Le Mans.
Los actuales campeones y dominadores absolutos de la prueba francesa en este siglo XXI, Audi, llegan con tres unidades del R10 y un plantel de pilotos idéntico al del año pasado, por lo que el objetivo no puede ser otro que repetir la victoria que logró el año pasado el único R10 que finalizó la prueba. Sus bazas contra Peugeot vuelven a ser las de siempre: mayor fiabilidad (aunque este año han sufrido más problemas de los esperados en las LMS y las ALMS), menor consumo de combustible y, cómo no, su intachable experiencia y saber hacer en La Sarthe.
Peugeot, por su parte, afronta su segundo intento de destronar a Audi con tres unidades del 908 HDI, el prototipo más rápido, con diferencia, de toda la parrilla. Sus formaciones están cargadas de ex-pilotos de Fórmula 1, y la única piedra que puede interponerse en su camino hacia la victoria es, precisamente, y con el permiso de los Audi, la fiabilidad a 24 Horas, aunque se ha mejorado bastante respecto al año pasado.
Y por detrás de los diesel de Peugeot y Audi, viene el pelotón de los gasolina, donde tenemos una interesante combinación de chasis y motores distintos, entre los que destacaría a los siempre a tener en cuenta Pescarolo, y al sorprendente Lola con motor Aston Martin del equipo Charouz Racing System.
Los Pescarolo no están para ganar como años atrás, pero sin lugar a dudas, los prototipos azules de Henri Pescarolo tirarán de fiabilidad y buen ritmo para aprovechar cualquier despiste en cabeza. Por lo que respecta al Lola-Aston Martin, ya ha demostrado que tiene un ritmo de carrera sensacional, aunque, como siempre pasa en Le Mans, habrá que comprobar si la dureza de la prueba pasa factura. El Charouz Racing System también llevará a la cita el Lola con motor Judd del año pasado.
Está por ver si las mejoras del Courage-Oreca permiten a sus dos unidades firmar un buen resultado en Le Mans. El podium en la última cita de las LMS en Spa debería ser una motivación adicional para creer en ello. Además, tener al volante un piloto con el bagaje de Olivier Panis siempre es algo a tener en cuenta.
Del resto de equipos, destacar, cómo no, nuestro representante español en la categoría, el Epsilon Euskadi ee1. En su primera participación en Le Mans tras sólo 3 carreras en las LMS, poco más se les puede pedir que terminar la carrera. Otro prototipo que debutará (este de verdad, pues no ha corrido ni una carrera) en Le Mans será el japonés Dome, que aunque sea un coche estéticamente precioso, debería pagar su juventud con problemas mecánicos.
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