Con los títulos de campeones del mundo de marcas y de pilotos debajo del brazo, llega la hora para que Olivier Quesnel vuelva a hinchar su orgulloso pecho galo y ataque de nuevo a Skoda. Tras quejarse de la superioridad de Skoda en el IRC por ser un equipo oficial y Peugeot no, ahora toca amenazar a los checos con la entrada de sus “chicos de rojo” para borrarles del mapa.
Una amenaza que no comprendo, ya que cualquiera estaría encantado de que Citroën se uniera también a la lista de participantes del Intercontinental Rally Challenge, incluyendo Skoda que podría plantarles cara sin ningún problema a los coches de los dos chevrones. Y es que parece que a Quesnel no le ha terminado de sentar muy bien la mala imagen mostrada por los pilotos semioficiales de Peugeot y el dominio de Juho Hanninen y compañía.
Por ello se encarga una y otra vez de recordar que el dominio de un equipo oficial como Skoda podría hundir al campeonato en menos de dos años. Sin duda, estas declaraciones de Quesnel se suman a su larga lista de bravuconadas.
Soy capaz de admitir que Skoda juega de acuerdo con las reglas, y admito también la reacción de los organizadores que dicen que el IRC es una competición abierta, pero ¿qué ocurrirá dentro de dos años cuando Skoda tenga dos o tres títulos? El IRC como competición desaparecería ya que todos pensarían que no tienen nada que hacer contra Skoda. Imaginen que yo coloco el DS3 y mi ejército el próximo año en el IRC. ¡Skoda no existiría! Pero si yo lo hiciese, Peugeot dejaba luego de correr. Este es el peligro de lo que va a ocurrir ahora, es por eso que digo que los organizadores tienen que tener cuidado.
Vía | Autosport.pt