Este viernes se producirá el tan esperado consejo Mundial, además de la confirmación oficial de las fechas del WRC también se espera que se presente el futuro promotor del WRC, o mejor dicho el anuncio definitivo de que Red Bull será el promotor del campeonato. La FIA además tendrá una serie de puntos más en el guion de la reunión, en los que se tratará una serie de cambios en el reglamento del Mundial de Rallyes.
En el primero de ellos se habla de la implantación en el resto de pruebas de la qualifying stage, o tramo de clasificación, que actualmente sólo se realiza para determinar el orden de salida de los rallyes de tierra. Esto significaría que en las pruebas de asfalto también se le daría una pasada al tramo del shakedown para elegir la posición de salida de la primera etapa. Obviamente el ganador siempre va a querer salir delante ya que sobre esta superficie siempre es más rentable salir delante ante la suciedad que sacan los pilotos a la pista.
Otro de los cambios de los que se hablará en la reunión es la posibilidad de poder poner la power stage en mitad del rally y no al final como se realiza actualmente. Con esto se intentaría que estos tramos que aportan un extra de 3,2 y 1 puntos para los más rápidos dejen de ser realizados sobre superespeciales o especiales cortas (antes llamados Mickey Mouse) y se hagan sobre verdaderos tramos de rallyes. Algo que este año no ha sucedido demasiado, con contadas excepciones como Ouninpohja en Finlandia.
Además de estas dos cosas comentadas por Robert Reid, ex-copiloto del fallecido Richard Burns, no estaría mal que se hablará del porqué de la baja participación de este año. El Rally de México no pasó de los 27 inscritos, el Rally de Gales tan sólo llegó a 31 y parece ser que el Rally de Cerdeña seguirá el mismo camino, llegando a una lista de 30 participantes. Desde luego la excusa de los cambios de fechas no vale para esta ocasión como pasó con la prueba británica.
Vía | Rallye-Magazine