Las sensaciones transmitidas por los pilotos de cara a la conducción nocturna que ya están experimentando en Singapur, no han caído en saco roto. Schubert, el fabricante de los cascos que se utilizan habitualmente en la F1 se ha adelantado a las dificultades de visión que se pueden presentar en este gran premio. Y lo hacen con una nueva visera térmica desarrollada aplicando tecnología aeronáutica, concretamente de los caza de combate. El objetivo principal no es otro que solucionar la incógnita que está dando más vueltas en el aire con las predicciones meteorológicas que hay para el fin de semana: ¿Cómo evitar los reflejos de la luz en las gotas de agua?.
La solución la ha encontrado Schubert diseñando una visera polarizada y totalmente antirreflectiva, tras experimentar con varios compuestos diferentes de diversos materiales y policarbonatos distintos. Además es térmica, pues han ideado un sistema alimentado por una pequeña batería que al estilo de las lunetas térmicas de los turismos iguala la temperatura interna del casco con la exterior. Así se previene y dificulta la aparición de vaho y humedad en la visera, posibilitando que la misma pueda llegar hasta una temperatura de 30º C si es necesario para ello. El propio Michael Schumacher ha sido el probador de estas viseras. Toda una garantía para los que serán primeros beneficiados en probar ésta nueva solución técnica en pro de la seguridad: Kimi Raikkonen, Felipe Massa, Nick Heidfeld, Mark Webber y Nico Rosberg.
Personalmente, detalles y avances así hacen grande la Fórmula 1 que siempre ha tenido como bandera la alta tecnología, y disfruto conociendo de ellos. Ahora sólo falta que un añito de estos inventen el casco con aire acondicionado, para cuando toque correr en Bahrein o Sepang donde supongo que lo que menos conviene aunque llueva es llevar una visera a 30º de temperatura delante de las narices ¿no os parece?
Vía | El Periódico