La Scuderia Ferrari es conocida en todo el mundo por ser EL equipo oficial de la legendaria marca italiana. Pero lo que muchos desconocen es que en su momento y hasta hace poco más de treinta años, la Scuderia Ferrari tenía un hermano pequeño con el nombre de North American Racing Team. Conocida con sus iniciales (N.A.R.T.), este equipo norteamericano fundado por Luigi Chinetti llegó a disfrutar de un estatus completamente de fábrica en su momento.
Luigi Chinetti, nacido en Italia en 1901, fue en su día mecánico de Alfa Romeo y más adelante piloto de carreras. Llegaría a ganar tres veces las 24 horas de Le Mans (1932, 1934 y 1949) además de las 24 horas de Spa-Francorchamps (1933, 1949), compartiendo coche con pilotos de la talla de Raymond Sommer o Louis Chiron, entre otros. La edición de la famosa carrera francesa es importante porque inicia su relación con Ferrari, tras vencer habiendo pilotado durante prácticamente la totalidad de la carrera. Una edición, por cierto, que tuvoa Joan Jover y Paco Godia en segunda y cuarta posición respectivamente, ambos a los mandos de sendos Delage.
Con los años y gracias a una buena relación con Enzo Ferrari, Chinetti se convertiría en el importador oficial de Ferrari en Estados Unidos, siendo además propietario del primer concesionario de la marca en el país. Con el tiempo, el "territorio" de Chinetti llegaría a abarcar prácticamente la mitad de los Estados Unidos. Tanto éxito (un 40% de las ventas totales de Ferrari en coches de calle desde los años 50 hasta fnales de los 70) le llevó a destinar parte del dinero obtenido a competir en carrera, fundando el North American Racing Team, equipo que participaría com Ferrari en las carreras de sport-prototipos y gran turismo.
El debut del equipo se produce en las 24 horas de Le Mans de 1957, aunque por aquel entonces la escuadra no está aún configurada y se trata más de una inscripción circunstancianl. No es hasta el año siguiente cuando el equipo toma forma de verdad y participa por primera vez con organigrama propio, estrenándose en las 12 horas de Sebring. Allí, dos Ferrari 250 GT participan inscritos con el nombre de North American Racing Team. Ambos terminan, y lo hacen en unas más que decentes quinta y séptima posición.
Poco a poco, los resultados fueron mejorando, destacando el cuarto puesto en las 24 horas de Le Mans de 1959 con un 250 GT Berlinetta. Al año siguiente, aún mejor, con una segunda posición global del Ferrari 250 Testarossa pilotado por Ricardo Rodríguez y André Pilette. En esa carrera hubo tres 250 GT del equipo de los cuales dos terminaron dentro del Top 10. En 1961 se produciría una caída de rendimiento en Le Mans, pero llegaba la primera victoria en los 1000km de París. Al año siguiente se inauguraría una importante cita en el calendario, en Daytona.
El N.A.R.T. ganaría la segunda carrera de resistencia internacional en Daytona, en 1963, aún con el formato de 3 horas, mientras que en 1964 se repetiría la victoria, ahora con formato de 2000 kilómetros. En este último caso, pilotos oficiales de Ferrari eran los encargados de hacer volar el 250 GTO. Pedro Rodríguez y Phil Hill eran ya viejos conocidos de Chinetti y ambos habían pilotado para él en años anteriores. El North American Racing Team estaba levantando el vuelo. Precisamente otro 250, el LM, fue el catalizador de dos de los grandes momentos del equipo.
Ante la posición de la federación italiana de no mostrar apoyo a Ferrari en la homologación del 250LM, que recibía la negativa de la FIA por no haberse construido suficientes unidades, Enzo Ferrari protestó de la forma que más podía doler. Para las dos últimas carreras del año del campeonato del mundo de Fórmula 1, en el que la marca se estaba jugando tanto el título de pilotos como el de constructores, la Scuderia Ferrari no participaría (oficialmente), haciéndolo en su lugar el North American Racing Team, con los coches en color blanquiazul en lugar del habitual rojo.
En situación normal ya habría sido duficiente protesta, que los coches de John Surtees y Lorenzo Bandini compitieran sin ir pintados del tradicional rojo italiano, pero cuando además Surtees obtuvo una segunda posición en Watkins Glen, la situación se volvió más dolorosa para los italianos de la federación. Pero el Sr. Ferrari siempre quería rizar el rizo, así que si para la penúltima carrera había llevado a dos pilotos, para la última llevaría a tres, siendo uno de ellos Pedro Rodríguez, el que en ese momento era el principal piloto del N.A.R.T.
Estaba claro; Ferrari estaba dispuesto a dejar el color rojo y la tricolore italiana en favor del azul y blanco y el Stars & Stripes estadounidense. Además, en una carrera electrizante en el circuito de Magdalena Mixiuhca (más tarde conocido como Hermanos Rodríguez), John Surtees se proclamó campeón del mundo con un segundo puesto a bordo de un coche italiano pero de una escuadra estadounidense. Ferrari ganó el campeonato de constructores, y Lorenzo Bandini completó el podio. Para acabar el día de fiesta de Enzo Ferrari, el tercer coche llegaba también a los puntos, con Pedro Rodríguez marcando en casa su primer punto con una sexta plaza.
Al año siguiente, más éxitos y otra gran temporada esperaba al equipo de Luigi Chinetti. Primero llegaba la sensacional victoria en las 24 horas de Le Mans, con Masten Gregory y Jochen Rindt, a bordo del 250LM (siendo este el segundo gran momento que el modelo le daba al equipo tras otorgarle la participación en la Fórmula 1 el año anterior). Hasta hoy en día, la de 1965 sigue siendo la última victoria de Ferrari en la legendaria prueba francesa, y vino de la mano del North American Racing Team.
Más adelante llegarían nuevas victorias en Zeltweg y en las 12 horas de Reims, certificando una gran temporada en los sport prototipos. Además, para terminar otro año destacado, 1965 volvería a ver a los coches del N.A.R.T. participar en el campeonato del mundo de Fórmula 1. Sería de nuevo en las últimas carreras del año; cuando al no participar John Surtees en la gira americana, Enzo Ferrari permitió a Chinetti traer no solo a uno, sino a dos pilotos. Pedro Rodríguez correría en Estados Unidos y México, mientras que Bob Bondurant lo haría en Estados Unidos.
Para México, Ludovico Scarfiotti debería haber competido, pero un problema en el coche de Rodríguez hizo que Scarfiotti no llegara a competir. Lo curioso del caso es que por única vez en la historia de Ferrari, dos equipos oficiales distintos participaron con coches de la marca italiana en la misma carrera, yendo además el de Lorenzo Bandini en rosso corsa, mientras que los del N.A.R.T. tenían unas líneas blancas y azules en medio para diferenciarse de los de la Scuderia.
En 1966, el N.A.R.T. participó en las 24 horas de Le Mans y de Daytona, aunque sin resultados suficientemente satisfactorios. De hecho, en Le Mans costaría varios años recuperar los buenos resultados. Pero en Daytona, aunque en 1966 se quedó el primer coche a las puertas del podio, en 1967 el equipo fue instrumental en el dominio de Ferrari, que copó las tres primeras posiciones con dos coches de la Scuderia en las dos primeras posiciones y con el coche del North American Racing Team en tercera plaza.
Fue un gran éxito para el equipo, que tenía aquí su coche pintado de rojo otra vez. Para Le Mans volvieron a los colores norteamericanos pero eso no les trajo demasiada suerte y no pudieron terminar la carrera. Hasta 1970 no se obtendría un buen resultado en Le Mans, con un cuarto puesto que a Ferrari le sabía a poco, tras perder una lucha a cara de perro contra Porsche y su 917, a pesar de las ganas que los italianos le habían echado con el 512 (esta batalla es la que podemos ver en la película Le Mans de Steve McQueen).
En Daytona, ese mismo año, la Scuderia Ferrari ya no tomaría parte, dejando la gestión de sus coches oficiales al North American Racing Team, que obtuvo resultados poco destacados puesto que Ferrari no tenía aún listos los 512. Al año siguiente, ya con los coches más competitivos, se consiguió una segunda posición que habría sido motivo de felicidad de no ser por el hecho que fueron batidos por Porsche de nuevo. A partir de entonces, la fisonomía del equipo cambiaría por completo, tras dejar de fabricar Ferrari coches de sport-prototipos.
El N.A.R.T. seguiría en las 24 horas de Daytona, con un segundo puesto en 1973 con un 365 Daytona GTB y la última participación del equipo en 1975. En cuanto a Le Mans, se siguió compitiendo hasta 1982, con un podio en 1971 con el equipo que fue cuarto en 1970. Más adelante, lo mejor llegaría con un sexto puesto en 1974 con el 365 GTB/4 y un noveno ese mismo año con un ya vetusto 312P. Finalmente, se volvería a llegar al Top 10 en la última participación del equipo en Le Mans, con el espectacular Ferrari 512BB/LM.
Quedó como legado la última victoria de Ferrari en Le Mans (hasta el momento, esperemos), así como una gran contribución a la competición, sobre todo en lo que a resistencia se refiere, ya que Luigi Chinetti no solo creía en estas carreras como la forma idónea de publicitar sus productos (en este caso coches Ferrari) sino que además era un gran apasionado de las carreras donde no solo importaba la velodidad, donde él había sido un gran piloto en el pasado (primer hombre en obtener tres victorias en Le Mans).
Además, también se construyó una versión especial del 275 GTB/4 pedida expresamente por Luigi Chinetti, llamada 275 GTB/4 NART Spyder y que resultó ser muy popular en Estados Unidos. Tanto es así, que además de las diez unidades que Ferrari fabricó para Chinetti (varias de las cuales vendió en sus concesionarios), muchas de las unidades "normales" del 275 GTB/4 fueron convertidas a posteriori para imitar la estética de la versión Spyder. Sin lugar a dudas, el N.A.R.T. fue el mejor hermano que la Scuderia Ferrari podría haber imaginado.