Una vez conocido el triste final de Super Aguri, queda todavía un culebrón por resolver, que esperemos no se salde con el mismo resultado que deje a los seguidores de Fórmula 1 con otra escudería menos en las parrillas: la venta de Toro Rosso.
Después de que hubiera sonado Lancia como posible comprador, los focos señalaron a otro de los que siempre aparece en este tipo de fregados: Nicolas Todt. Pero al parecer, el hijo de Jean Todt tiene suficiente con la escudería ART de la GP2 y con llevar el management de Felipe Massa y Sebastien Bourdais, por mucho que la mayoría de especialistas se empeñen en subirlo a la Fórmula 1.
El ascenso pasito a paso de Nicolas Todt puede acabar en la Fórmula 1 a medio plazo, pero de momento el francés desmiente que esté tras Toro Rosso, aunque avisa: "Mientras la normativa sea tan incierta como actualmente, no es interesante tener un equipo sin el respaldo de un gran fabricante. Seguiré con los ojos bien abiertos".
Vía | Forumula 1