Cuando se confirmó el fichaje de Fernando Alonso por Ferrari, poco se tardó en colocar a Felipe Massa como segundo piloto de la escudería. Rápidamente, el brasileño dio un paso al frente y afirmó que iba a vender cara su derrota. Seis grandes premios después, creo que a nadie le quedan dudas sobre quién es el primer piloto y quién es el escudero. Aunque en estos momentos, no podemos decir que en Ferrari están en el cénit de la temporada.
Tras las tres primeras carreras, Felipe Massa se puso líder sin hacer demasiado ruido. Eso sí, con ciertas críticas por entorpecer el ritmo de carrera de Alonso en Australia. Sea como fuere, a partir de China, Massa ha perdido gas y de momento ya no le vemos como aspirante al título como presentíamos a comienzo de temporada.
Todo ello ha hecho que en las quinielas de pilotos para la próxima temporada, todo el mundo da por hecho que el segundo asiento de Ferrari estará libre para la llegada de un Robert Kubica, un Mark Webber o similares.
Su manager, director de ART Grand Prix e hijo del presidente de la FIA, Nicolas Todt, ha salido en defensa de su pupilo. Su relación con Ferrari es excelente y por el momento no piensan en buscar nuevo asiento para la próxima temporada. Eso sí, ya han encontrado cual es el problema de los males de Felipe Massa en este 2010: los neumáticos. Más concretamente con los duros.
Cuando veo a Felipe siendo seis décimas más lento por vuelta, como ha pasado algunas veces, no me creo que sea por el pilotaje; si fuera así, tendría que cambiar de trabajo. Hemos visto que con neumáticos superblandos Felipe ha estado al nivel de Alonso, como en Mónaco y Bahréin. La verdad es que Felipe tiene problemas con los neumáticos duros, porque el coche no tiene carga suficiente para su estilo de pilotaje, y Massa sufre más para controlar el monoplaza en comparación con Alonso. El equipo ha identificado las áreas en las que trabajar para satisfacer a Felipe, así que soy optimista.
Vía | TheF1.com