¿Quién no terminó la sesión de calificación de ayer con un movimiento tontorrón del pie derecho? Yo desde luego, no pude evitarlo, y lo que nos espera esta tarde va a ser algo así como multiplicar ese estado de nervios por diez. Con el dibujo que nos deja la parrilla de salida, está claro que los que quieren que gane el título Felipe Massa se fueron a dormir ayer, cuanto menos, esperanzados.
Hasta hace bien poco, el llegar a Brasil era simplemente ver si Hamilton era capaz de volver a perder el título por segundo año consecutivo, pero la única esperanza real pasaba por una rotura de su motor de segundo ciclo. Ese es un riesgo evidente, que esta tarde estará presente durante toda la carrera, pero es que visto lo visto, podemos hablar de por lo menos tres factores más (y seguro que hay más), que nos pueden hacer pensar que esto no está hecho, ni mucho menos.
El primero de ellos son los neumáticos. Aquí en Brasil el delantero derecho se bloquea a menudo y puede deparar problemas. Y no es por llamar al mal tiempo, pero Lewis ha tenido siempre problemas con ese delantero derecho que hizo famoso al chunking y que condicionó su estrategia en Turquia este año. Además, el viernes dejó un neumático en las lonas, además de devolver otros tantos con unos planos considerables.
Después tenemos el factor lluvia, que aunque parezca que puede beneficiar a Hamilton por las prestaciones del MP4-23 en esas condiciones, no debe apetecerle demasiado, pues el factor "lotería" no le conviene en exceso en un panorama en el que una carrera normal le daría el título casi con toda seguridad.
Incluso podríamos meter en el saco de los peligros a tener en cuenta las estrategias, pues habrá que ir con cuidado con, por ejemplo, los Toro Rosso, que se han mostrado muy rápidos todo el fin de semana, y como mañana vayan considerablemente más largos que Hamilton podrían dar alguna sorpresa. Y claro, la estrategia que siga Alonso, Trulli o Heidfeld también está por ver.
Por último, ¿cómo olvidarnos de la salida? Ese será sin duda "El momento". Allí se puede perder un título en un abrir y cerrar de ojos, y salir 4º no es demasiado agradable para alguien que se está jugando tanto. Además, habrá que ver cómo se plantea la salida el resto de pilotos, sabiendo que Hamilton no debería tomar ningún riesgo, lo lógico sería que atacaran algo más de lo normal para ganar esa posición. Sigo pensando que me merece un interés especial lo que haga Alonso en ese determinante momento.
Mañana veremos como juega las cartas Lewis Hamilton, que por si tuviera que celebrarlo, se ha traído a Brasil a su novia, componente de las Pussycat Dolls, y que todo sea dicho, seguro que le sube la moral en caso que algo no vaya como se espera.