Última prueba del Nacional de Asfalto: 55ª edición del Rallye Costa Brava. Tres pilotos llegan con posibilidades matemáticas de hacerse con el título de campeón aunque solo dos con posibilidades reales. El Costa Brava iba a ser un duelo entre el alicantino Miguel Fuster y el asturiano Alberto Hevia, con ventaja en la clasificación general para este último. Mientras que Sergio Vallejo y su Porsche 911 eran los terceros en discordia, teniendo que esperar un abandono de los dos primeros para aspirar al título.
El rallye estuvo dominado casi de principio a fin por Hevia, con un VW Polo S2000 maltrecho y dándole achaques en cada tramo que se disputaba. El primer problema fue con la dirección, que giraba más a un lado que a otro. El problema fue descubierto durante el Shakedown pero el equipo de Hevia fue incapaz de solucionarlo. A pesar de ello, Berti mandaba la clasificación tramo tras tramo con un Miguel Fuster que no conseguía sacar partido a esos problemas del asturiano a los que habría que sumar la rotura de un colector durante el tercer tramo. El asturiano parecía imparable. Por detrás Sergio Vallejo rompía un amortiguador y penalizaba en la asistencia, con lo que decía adiós a lucha por la victoria en el rallye. Pero aún quedaba un último golpe de teatro. Al último tramo los dos protagonistas llegaban separados por 1,9 segundos. Miguel Fuster había realizado un gran trabajo durante los tramos de la tarde para recortar la diferencia y dejarla en esos exiguos dos segundos. Diferencia que no serviría de mucho. Al VW Polo se le rompía una rótula que mandaba a Hevia a la cuneta y a Fuster le encumbraba como campeón de España. Todo el trabajo del asturiano se veía truncado por un coche demasiado frágil que a pesar de todo le ha permitido luchar por el título hasta la última prueba, sin olvidar el gran campeonato que también ha realizado el alicantino.
Cabe destacar el buen papel realizado por dos pilotos cántabros. Chus Puras, que hacía debutar en el nacional al Ferrari 360 Modena GT, conseguiría alcanzar el último cajón del podio, mientras que el joven Sergio Pérez, a los mandos de un Clio S1600, terminaría en una meritoria cuarta posición.
Vía | Rallyes.net