Ayer y tal como estaba previsto ayer jueves, María de Villota compareció antes los medios de comunicación en la sede del Consejo Superior de Deportes (CSD) de Madrid. La española estuvo arropada en todo momento por Carlos Gracia, presidente de la Federación Española de Automovilismo (RFEA), Miguel Cardenal, presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD) y el doctor César Casado, jefe de cirugía plástica del Hospital de La Paz. Antes de comenzar, Carlos Gracia quiso dejar claro que María no puede hablar de nada relacionado con el accidente ya que todavía está abierta la investigación y existe secreto de sumario sobre el caso.
En un primer momento María de Villota no alcanzó a comprender la gravedad de sus lesiones. Sabía que como piloto, necesitaba los dos ojos para seguir en la máxima competición aunque posteriormente comprendió que la labor de los médicos había sido encomiable y le habían dado una segunda oportunidad, una segunda oportunidad que aprovechará al cien por cien:
Cuando me desperté, se me acercó un cirujano que me dijo que habían podido salvarme la vida, pero que había perdido el ojo”. “En ese momento, le dije que soy piloto y que necesitaba dos ojos para pilotar, igual que él, como cirujano, necesita las dos manos para operar aunque luego me di cuenta del labor del trabajo de los médicos.
Ahora veo más que antes, veo más allá de la Fórmula 1, veo lo importante. Este ojo me ha devuelto el norte. Esta nueva oportunidad la voy a vivir al 100%.
Sabedora de que todavía le queda por superar una larga recuperación, o carrera de resistencia como ella misma lo ha nombrado, quiso agradecer todas las muestras de cariño recibidas desde su accidente.
Me pregunté quién me iba a querer a mí, y me he encontrado con que me han querido más que en toda mi vida. He recibido mensajes y muestras de cariño de todos los pilotos, de la gente. Por eso ahora me miro al espejo y estoy orgullosa, porque creo que la imagen actual dice más de María de Villota que la de antes del accidente.
Fiel a sus ideas, volvió a reivindicar un sito para las mujeres en la Fórmula 1:
Las cicatrices poco a poco se irán cerrando. No me arrepiento de nada. He vivido a tope. Simplemente me gustaría que la mujer tuviera ese sitio en la Fórmula 1 y que las niñas que están en el karting tengan a alguna mujer que les sirva como referente.
Por último, tomó la palabra César Casado, jefe de cirugía plástica del Hospital de La Paz. Dijo estar preocupado por las secuelas pero sobre todo a nivel psicológico ya que las cicatrices nunca podrán ser eliminadas del todo y evitarán que se pueda olvidar por completo el accidente.
Es un accidente muy grave y se trata de salvar la vida y tratar de lograr la normalidad cuanto antes pero muchas veces la normalidad no puede ser completa al cien por cien
Por supuesto tuvo palabras para admirar la fuerza de superación de María de Villota durante el proceso de rehabilitación que ha sufrido hasta ahora:
Tuvo una serie de lesiones intercraneales con fracturas craneales, faciales, pérdida del globo ocular. Ha perdido el olfato, por ejemplo. A pesar de ello, es una paciente con una gran fuerza de superación.