Otra vez, y ya empiezan a ser demasiadas carreras seguidas como para que sea casualidad, los dos Toro Rosso se ha mostrado a un nivel realmente sorprendente en un trazado tan exigente como Spa-Francorchamps.
Si yo fuera Sebastian Vettel, estaría preguntándome si el ascenso a Red Bull la próxima temporada es realmente un paso adelante o no, porque últimamente, Toro Rosso le está dando unos buenos repasos a la teórica escudería "A".
En la carrera de hoy, Sebastian Vettel ha cruzado la meta en 5ª posición y Sebastien Bourdais 7º, pero a falta de una vuelta, era el francés, debutante en F1, el que rodaba en la 3ª posición que había dejado Fernando Alonso al entrar a boxes a cambiar de gomas. Hubiera sido increíble ver a Bourdais en el podium, pero para nada casual.
El francés, con su alerón puente roto desde la misma salida, ha rodado toda la carrera en 5ª posición, por detrás de Fernando Alonso, y controlando a su zaga nada más y nada menos que al BMW Sauber de Robert Kubica. La complicadísima última vuelta es lo que ha impedido a Bourdais subirse al cajón. Su plaza del podium la heredó en un principio el otro Toro Rosso, el de Sebastian Vettel, que fue superado en las últimas curvas por Heidfeld y Alonso con gomas más adecuadas a las condiciones de la pista.
Sin duda, los Toro Rosso están a un nivel buenísimo últimamente, sea o no sea gracias a su potente motor Ferrari, pero lo que está claro es que en Monza, próxima cita del calendario, pueden dar mucho que hablar.