Increíble carrera de Fórmula 1 la que hemos vivido en Silverstone. Lewis Hamilton se ha llevado una victoria que tenía sellado el nombre de Valtteri Bottas gracias a un oportuno Safety Car. Los dos Mercedes se han batido en duelo en las primeras vueltas de la carrera, con Bottas saliendo como ganador.
Sin embargo a 30 vueltas del final un accidente de Antonio Giovinazzi ha cambiado el curso de la carrera. El Alfa Romeo ha quedado entrampado en la puzolana y ha provocado la aparición del coche de seguridad cuando Bottas ya había parado y Hamilton aún no. Con la carrera neutralizada, el británico se ha aprovechado para montar el neumático duro y ganar la carrera a placer.
Verstappen y Leclerc fueron los héroes de la carrera, Vettel el villano
Aunque en la cabeza ha habido lucha, la verdadera emoción ha estado por la tercera posición. Max Verstappen y Charles Leclerc han prolongado el duelo de Austria aquí en Silverstone regalándonos uno de los mejores duelos de los últimos tiempos. El piloto de Red Bull parecía tener más ritmo, pero Leclerc ha dado una lección de resistencia.
Incluso ambos pararon en boxes a la vez y Verstappen parecía salir ganador, pero con neumáticos fríos Leclerc recuperó la posición. Todo acabó después del coche de seguridad, cuando ambos pilotos se tocaron y el Ferrari salió peor parado, con algunos problemas en su suspensión delantera izquierda. Leclerc se quedaba en la quinta posición.
Sin embargo Verstappen sí que había salido con el coche intacto del golpe, así que decidió marcharse a por un Sebastian Vettel totalmente desdibujado este fin de semana, y al que el azar del coche de seguridad había puesto tercero. Verstappen alcanzó a Vettel y no tardó demasiado en superarle, pero en un error muy grosero el tetracampeón le golpeó por detrás.
Verstappen voló por el piano y se fue a la puzolana, aunque por fortuna consiguió sacar el coche y terminar la carrera quinto. Peor le fue a Vettel, con el morro totalmente destrozado y que encima fue sancionado con diez segundos por causar el accidente. Vettel se queda sin puntuar y Charles Leclerc hereda la tercera posición del podio que parecía perdida.
Por delante a Bottas le quedaba una parada más en boxes, pero conseguía hacerla sin perder la segunda posición gracias a todos estos incidentes. Montar el neumático blando al final parecía que le aseguraba la vuelta rápida, pero en un último alarde de superioridad Lewis Hamilton mejoraba su tiempo en el giro final y se sumaba el punto extra antes de ganar la carrera.
De este modo la ventaja de Lewis Hamilton vuelve a subir hasta los 39 puntos con respecto a Valtteri Bottas y el mundial parece totalmente sentenciado. Se le complican las cosas a Sebastian Vettel, y no solo porque se le escapa Max Verstappen en la tercera posición, sino porque Charles Leclerc se queda tres puntos por detrás y con mucho más ritmo en los últimos fines de semana.
En cuanto al resto del mundo, la fortuna también sonrió a Carlos Sainz. Junto a Lewis Hamilton y Sebastian Vettel, el español fue el otro gran beneficiado del coche de seguridad y consiguió remontar hasta la sexta posición gracias a poder hacer la parada en boxes con la carrera neutralizada. Iguala Sainz su mejor resultado del año.
Sainz tuvo que luchar hasta la última curva con un combativo Daniel Ricciardo, que terminó séptimo. La mala fortuna se cebó esta vez con el otro McLaren, el de Lando Norris, que estaba sólidamente asentado en la séptima posición hasta que el coche de seguridad destrozó su estrategia y le dejó fuera de los puntos en la carrera de casa.