Todos los esperábamos, pero aun así el revuelo que se ha montado durante estos dos días en torno al mundo de los rallyes ha sido una verdadera locura. Tras la presentación del Peugeot 208 R5 y del Hyundai i20 WRC, la guinda del pastel la ponía hoy Citroën anunciando el esperadísimo futuro de Sébastien Loeb y el acuerdo de patrocinio firmado con Abu Dhabi.
El Peugeot 208 R5 es muy bonito. Además de presentar una novedad con esas líneas más agresivas que en el 208, la marca ha recuperado los extraviados colores que la hicieron mítica en el Mundial de Rallyes. Así pues la decoración de los Peugeot 205 T16 han vuelto a aparecer en un coche que promete dar mucho juego al contar con un motor 1.6 Turbo que permitirá al 208 ser mucho más “juguetón” que su hermano mayor, el 207 S2000, y dar unos nada despreciables 280 CV. Además seguirá siendo un reto su pilotaje para los pilotos con el cambio secuencial mecánico que montarán todos los coches de la categoría R5.
Por su parte el Hyundai ha tenido gran repercusión, pero se podría decir que la presentación del coche hecha por la marca coreana no ha sido todo lo espectacular que debería. Además del coche/maqueta que pudimos ver ayer, el i20 WRC ha hecho su primera aparición en movimiento en un video bastante cutre grabado hace unas semanas en Gran Bretaña.
Esperemos que esta nueva andadura de Hyundai en el Mundial de Rallyes sea mejor que la anterior. En esta ocasión parece que la fábrica no confiará el proyecto a ningún preparador y será su propio departamento de competición el que se encargue de desarrollar el coche en las instalaciones de Alemania. Si lo comparamos con el Ford Fiesta RS WRC o el Citroën DS3 WRC se ve como al i20 todavía le faltan muchas cosas por pulir.