Ha sido un fin de semana muy movidito, sobre todo en casa de Citroën donde la guerra entre Sébastien Ogier y Sébastien Loeb no se ha enfriado ni tan siquiera tras el anuncio de la renovación del alsaciano por dos años más. Tanta fue la tensión sufrida dentro del equipo que Loeb terminó diciendo de su compañero equipo que tal vez “hablaba demasiado”
Y es que el viernes por la noche Olivier Quesnel ya le dio a sus pupilos las órdenes de que no quería luchas estúpidas cuando tenían un doblete tan por la mano. La joven estrella francés mostraba durante todo el sábado su disconformidad ante dicha decisión y tras conocer que el desafortunado pinchazo de Loeb contestaba a los micrófonos de la radio que se había hecho justicia deportiva.
En Citroën había una batalla campal por ganar, pero lo peor se estaba dando dentro de Ford. El equipo de la marca del ovalo comenzaba con la esperanza de ganar una de las tres pruebas de asfalto de la temporada, sin embargo desde el segundo tramo todas sus posibilidades se esfumaban tras fallar en la monta de neumáticos para una especial en la que la lluvia hizo acto de aparición a mitad del recorrido.
Pinchazos, roturas de suspensión y más pinchazos dejaron a los dos pilotos finlandeses sin ninguna posibilidad de llegar al podio. Esta situación fue aprovechada por Dani Sordo que completó un fin de semana espectacular a los mandos del prometedor Mini Countryman WRC. Aunque tal vez no piense lo mismo Kris Meeke ya que de nuevo se volvió a quedar a metros para llegar a la meta por un problema mecánico.
Los tiempos del cántabro fueron muy regulares, estando siempre entre los cinco primeros, justo por detrás de los Citroën que siguen siendo intocables en este terreno, pero por delante en muchas ocasiones de los Ford oficiales. El coche se sigue mostrando un poco lento en las curvas de menor velocidad, algo que evidencia una clara muestra de escasa potencia en el motor desarrollado por BMW. Esperemos que antes de la próxima temporada el propulsor pueda estar evolucionado.
Más atrás nos encontrábamos a Petter Solberg. El noruego no está pasando un buen momento y de nuevo se ha mostrado muy lejos de los tiempos de los oficiales. Kimi Raikkonen en cambio se llevaba una merecida sexta plaza en una actuación bastante regular. Otros protagonistas de la prueba fueron Dennis Kuipers y Peter Van Merksteijn que a pesar de ser considerados unos “gentleman drivers” más, completaron un buen rally.
En la WRC Academy pudimos ver por primera vez las verdaderas manos de nuestros pilotos en un terreno que siempre les ha gustado más que la tierra, y que en el caso de Cohete, conoce mucho mejor. Sin embargo Craig Breen ha demostrado su verdadera velocidad durante los dos últimos rallyes, y de no ser por los problemas durante las dos primeras pruebas de la categoría habría estado luchando por la victoria con Egon Kaur.
La SWRC también tuvo a un dominador este fin de semana. Ott Tanak sigue haciendo meritos para que M-Sport se fije en él como piloto para el WRC y se llevó la prueba de calle. Tras las salidas de pista de Juho Hanninen y Martin Prokop la victoria le quedó aun más fácil, terminando con una ventaja de más de cinco minutos y medio sobre Nasser Al-Attiyah que desde luego está muy alejado del prototipo de un verdadero especialista de asfalto.