Vuelvo con una de mis secciones preferidas en la que os muestro la otra cara de los rallyes, habitualmente en forma de uno de mis videos con los que tanto os he atormentado durante los últimos años. En esta ocasión toca hablar de la victoria, pero también de la derrota. Porque muchas veces sólo vemos el triunfo en el deporte aunque obviamente una cosa implique a la otra.
El mundo de los rallyes no se escapa a ello, más aún al tratarse de un deporte en el que el primer rival que tienes es el cronometro, el segundo es el otro piloto y finalmente, el último y no menos importante, tú mismo. Una oda a todos esos pilotos que han conseguido saborear las mieles del primer puesto, pero también para todos aquellos que han probado el sabor salado de la decepción y las lágrimas.