El Gran Premio de Alemania nos deja una imagen para el recuerdo, la de Fernando Alonso subido en el Red Bull RB7 de su amigo y rival Mark Webber. El Ferrari 150º Italia del español estaba con la gasolina justa para que la FIA tomara la muestra de rigor a la conclusión de la carrera. Para evitar sustos innecesarios decidieron parar el coche en el margen de la pista.
La FIA extrae un litro de combustible del depósito a la finalización de cada prueba para analizarla en el laboratorio. De esta forma contrastan la muestra recorgida con aquella que se les ha proporcionado de antemano. Debido a ello Sébastien Buemi fue sancionado el sábado, al no coincidir la muestra extraída de su depósito con la que tenía la FIA en su poder.
En la conferencia de prensa posterior a la carrera, preguntado por dicha cuestión Fernando Alonso aseguró que no había tenido que ahorrar gasolina en las últimas vueltas. ¿Deberíamos creerle? A mí ciertamente me deja con dudas.
No creo que Ferrari se diera cuenta en la vuelta de camino al pitlane, a ultimísima hora, de que el depósito estuviera en reserva. En una competición donde cada detalle se tiene controlado al milímetro, no se me pasa por la cabeza que este detalle se les pasara por alto. No pudimos escuchar las conversaciones por radio entre el piloto de Ferrari y el muro, porque seguro que las hubo. Quizá me equiovoque y es que nunca hubo tal conversación…
Una posibilidad más razonable, que ya comentó Pedro de la Rosa en la retransmisión, es que la Scuderia calculó la carga dando por hecho que iba a llover durante la prueba. Como el consumo en condiciones de lluvia es menor, aligeraban el coche poniéndole menos gasolina. Como finalmente la carrera se disputó en seco durante su totalidad, la carga de combustible se mostró insuficiente.
Stefano Domenicali, preguntado por la razón por la que el monoplaza de Fernando Alonso se quedó en reserva, dio el silencio por respuesta. ¿Quería tapar un posible error o despiste del equipo? Quiero pensar que Fernando Alonso o su equipo conocían que el monoplaza iba a llegar justito de gasolina a la bandera a cuadros. O eso, o corrieron un enorme riesgo de no llegar a meta y jugarse un más que merecido segundo puesto.
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