La nueva asociación de equipos de F1, la FOTA, se está mostrando de lo más activa desde su reciente fundación y según las últimas informaciones, las escuderías están proponiendo a la FIA una serie de cambios para el futuro inmediato del Mundial de F1 que cambiarían por completo la realidad actual de este deporte.
Desde dotar con un premio de un millón de dólares al piloto más rápido los viernes, pasando por ampliar a seis horas los entrenamientos de los viernes o premiar con puntos a los pilotos más rápidos en la sesión de calificación. Propuestas como éstas que al parecer persiguen mejorar el espectáculo y reducir los costes de este deporte.
Pero ahí no acaban las propuestas. El objetivo de ampliar a seis horas los entrenamientos de los viernes sería a cambio de prohibir los test privados durante la temporada, reservándolos para los periodos de pretemporada, lo que ayudaría a reducir en mucho los costes de los test privados.
Y eso no es todo. También hay equipos que proponen adelantar la hora de inicio de las carreras en Europa, fijándolas a media mañana para que "a las 12:30 la carrera ya hubiese acabado y la gente tuviera el resto del domingo libre para hacer otras cosas", ha asegurado el jefe de Toro Rosso, Franz Tost.
Por último, un tema ya muy manido, como es el que proponen los equipos más modestos de la parrilla, que insisten en poner un tope presupuestario para que no existan las abismales diferencias que vemos actualmente en el Mundial. En resumen, una serie de cambios revolucionarios, por supuesta en fase embrionaria, pero alguno de los cuales podría prosperar. Habrá que esperar.