Bernie Ecclestone sigue haciendo de las suyas, acusando aún más la transformación por la que está pasando la Fórmula 1 últimamente. Después de las decisiones tomadas con respecto a los números, la doble puntuación en Abu Dabi y la constante amenaza de más presencia de paises con poca tradición en la categoría, esta vez el anuncio cambia la fisonomía de los fines de semana de carreras. Ello se debe a que la Fórmula 1 adoptará el sistema "Racing Safari" para 2014.
Copiando lo que ya se ha visto en las categorías japonesas como la Super Fórmula y el Super GT, a partir de 2014 durante la primera sesión de entrenamientos libres de cada gran premio, dos autobuses invadirán la pista. Dichos vehículos irán cargados con VIPs, que pagarán a priori precios desorbitados para poder vivir una experiencia única como es estar circulando por un circuito de Fórmula 1 mientras los monoplazas ruedan por el trazado.
Aunque a priori parece una locura, la experiencia en Japón dice que es suficientemente seguro gracias a un sistema que penaliza a los pilotos que sufren una mera salida de pista cuando los autobuses están en el circuito, asegurando así que vayan con aún más margen de seguridad del habitual. Claro que habrá que ver si con tanto margen de seguridad, se pueden sacar conclusiones aerodinámicas, de neumáticos o hacer simulaciones de carrera, claro.
Por otra parte, los circuitos ahora se plantean si los autobuses deberán llevar decoraciones que muestren los colores de sus banderas, así como imágenes del propio circuito o será el patrocinador de cada evento el que disfrute de una publicidad extra. Es posible que a nivel deportivo esto no sea un gran cambio pero lo que está claro es que la Fórmula 1 da un paso más hacia el espectáculo puro y duro, mereciendo aún más el apelativo de "Gran Circo".
Los primeros rumores apuntan a que los conductores de los autobuses podrían ser ex-pilotos de cada país siempre que fuera posible, añadiendo así a la experiencia. Subirse a este autobús con Mario Andretti en Austin, Michael Schumacher en Hockenheim, Jacky Ickx en Spa-Francorchamps y Taki Inoue en Suzuka sería desde luego una experiencia única. La decisión está tomada. Ahora solo falta ver exactamente cómo se aplicará el concepto.