Seguro que muchos os acordareis de aquel video que puse hace unos meses en el que veíamos al desaparecido Richard Burns cometer un error tras perder la concentración por algo que había al pie de la carretera. Aquello fue el Rally de Nueva Zelanda de 2000 y una muñeca hinchable con un curioso artilugio despistaba a todo un Campeón del Mundo de Rallyes.
Pero hasta en las mejores familias esto puede ocurrir. Este año sin ir más lejos la historia se repetía en el mismo sitio con Mark Tapper, que hasta la especial de Baker era líder de su categoría, y que al contrario que Burns terminaba volcando tras ver una imagen en la cuneta que seguro no se le olvidará un mucho tiempo. Si queréis descubrir el motivo del vuelco de este pobre hombre ya estáis tardando en darle al Play.
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