El popular piloto colombiano, ganador de Grandes Premios en todas las categorías donde ha participado, confesó que, aunque todavía presta atención al campeonato de Fórmula 1, jamás se arrepentirá de su deserción porque nunca tuvo un coche para ser campeón. Montoya, quien competirá este año con Penske en la Indycar, manifestó que en la Fórmula 1 es poco lo que realmente se puede demostrar si el monoplaza no está al nivel del piloto. Además, agregó que, a diferencia de otras competiciones, la Fórmula 1 está muy contaminada por la política y eso es perjudicial para todos los involucrados.
El bogotano, quien estuvo en la Fórmula 1 desde el año 2001 hasta el 2006, fue de los principales animadores en esa época, inclusive resultó un respetable adversario para Michael Schumacher. Sin embargo, su arrojo y determinación tras el volante solo eran comparables con su carácter cerrado y su antipatía para con los medios de comunicación. Inocultable resultó el hecho de que su relación laboral, tanto con Williams como con McLaren, terminó de la manera más agria. Para Montoya, el ambiente en la Fórmula 1 no resulta el adecuado para cultivar afectos.
Para ganar en la Fórmula 1 se debe tener un coche capaz de hacerte ganar. Si no se cuenta con el coche, pues el hecho de que sea un buen piloto carece de importancia. Analiza el caso de Michael [Schumacher], cuando él estaba en Ferrari era muy competitivo, pero con Mercedes no hizo mayor cosa. Por mi parte, creo que he logrado grandes conquistas, pero no contar con un buen coche me restó todas las posibilidades de ganar el título. Nunca he tenido muchos amigos y el ambiente de la Fórmula 1 no sirve para eso. Cuando era piloto de McLaren no tenía libertad para pasearme por los boxes de otros equipos, ni siquiera para acercarme al de Ferrari. Con Michael Schumacher, en siete años, solo hablé una vez. No éramos amigos sino rivales deportivos. En cambio, en la IndyCar todo es diferente, las relaciones entre pilotos son más abiertas y sinceras. También debe contribuir el hecho de que hay mucha paridad entre los pilotos, todos llevan el mismo chasis y hay poco más de un segundo de diferencia entre el primero y el vigésimo. En la Fórmula 1 jamás se observará algo similar.
Vía | nextgen auto