El Gran Premio de Japón se queda por ahora en nuestra cabeza por el terrible accidente de Jules Bianchi. Pero además de este hecho, la prueba ha tenido otros muchos puntos de interés a nivel deportivo como es la buena actuación de Jenson Button, que ha pescado un quinto puesto en Suzuka.
El resultado de Button ha venido dado por una carrera en la que se ha aprovechado de las condiciones climáticas para sacar el máximo partido de un coche que en situación normal no debería estar a la altura de los mejores. Aún así, en momentos determinados el británico era el piloto más rápido en pista, incluso más que los Mercedes y Red Bull.
Tras reiniciarse la carrera después de la primera media hora sin coches en pista, Button ha entrado en boxes para reemplazar los neumáticos de lluvia extrema con los que ha tomado la salida. El nuevo juego de gomas tenía el color verde en el lateral y aunque inicialmente parecía que montar los neumáticos intermedios era demasiado arriesgado, la decisión ha resultado ser la adecuada.
Tras un par de vueltas, casi todos los pilotos habían copiado la decisión del campeón del mundo de 2009, cuyo futuro a día de hoy es incierto. Pero por lo menos, Button ha hecho lo máximo posible para rentabilizar una situación que le ha acabado dejando en tercera posición y siendo más rápido que los Mercedes e incluso en algún punto que los Red Bull en plena recuperación.
Parecía que su cambio de gomas a falta de diez vueltas para usar las de lluvia extrema era una nueva decisión de éxito pero la interrupción de la carrera nos privó de ver la resolución de su estrategia. Aunque el podio era ciertamente posible en las circunstancias excepcionales del día de hoy, es innegable que Button ha aprovechado la carrera para que McLaren adelante a Force India en el campeonato de constructores. Y por ahora, eso vale mucho.