El pasado fin de semana se disputaba una edición más del Circuit of Ireland, una de las pruebas con más tradición de toda Europa. Además de convertirse en un éxito de público, los pilotos quedaron encantados con la prueba irlandesa y en concreto con el tramo de Hamilton, donde la gran cantidad de cambios de rasante hizo que los pilotos finlandeses se encontraran prácticamente como en casa.
La cita isleña siempre se ha caracterizado por tratarse de un rally rodeado de precioso paisajes, muy rápido, estrecho y que habitualmente pone en dificultades a los pilotos. A pesar de ello y del poco agarre que tiene el asfalto (en gran parte por lo turbulenta que es la meteorología por esas latitudes), los pilotos han declarado estar más que encantados con la prueba. Incluso Esapekka Lappi bromeó con que sólo les hace falta añadir una etapa más para ser una prueba valedera para el WRC.
Hace unos días, Autosport aseguraba que tan sólo Brasil y China se encuentran en la carrera por unirse al calendario del Mundial de Rallyes. Sin embargo, el deseo de los organizadores, las numerosas voces positivas y con la prensa británica presionando para ello, Irlanda puede sumarse a las otras dos citas. Sin duda, el WRC precisa de asfalto entre sus fechas y los recorridos del Circuit pueden ser ideales para tener una prueba “diferente” al resto.