La pasada semana, buscando información sobre el anuncio de Honda de su llegada al WTCC, encontré una información que todo el mundo daba por hecho pero que aún no era oficial. Al igual que ha hecho su gran rival, Toyota, con el Prius, Honda ha preparado un prototipo híbrido, el Honda CR-Z, para participar en el Super GT. El pequeño coupé defenderá los colores de la marca de Tokio dentro de la categoría pequeña, GT300. El nuevo Honda CR-Z de competición ha desarrollado por la propia Honda en colaboración con Mugen. El debut será en la cuarta cita de la temporada.
Será interesante ver como los prototipos Made in Japan, el Prius, el Cr-Z o el Subaru BRZ, se miden ante los GT, especificación FIA GT3 con retoques, procedentes del viejo continente. Los GT3 han convertido a la categoría GT300 en la competición que ostenta el título honorífico de ser la que más marcas distintas tiene en su parrilla. El pasado año un BMW Z4 GT3 se hizo con el título.