Si la problemática propia del Circuito Gilles Villeneuve con el calentamiento de los frenos y la falta de grip no fuese suficiente, la lluvia podría ser el invitado de lujo en el Gran Premio de Canadá que comenzará en la jornada de mañana. El viernes el tiempo parece que dejará tranquilo a la parrilla pero los pronósticos tanto para sábado como para domingo, hablan de temperaturas no demasiado elevadas y opciones de lluvia, del 50% (desde ayer ha subido en un 10%) y 60% el sábado y domingo respectivamente.
Así que además de mirar a la pista, a los equipos les va a tocar mirar al cielo a la hora de preparar las estrategias. Lo que si parece claro es que sin altas temperaturas, los neumáticos blandos y superblandos escogidos por Pirelli no deberían sufrir más de la cuenta. Aunque eso es pura teoría. Mañana con los libres, y el sol en el cielo, lo comprobaremos. Si llueve, será otro cantar.
Vía | TheWeatherChannel
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