Muy complicada la clasificación de Fernando Alonso en Spa Francorchamps, con tiempo variable, tráfico y una Q3 que no salió bien de todas formas, visto desde cualquier punto de vista. La sesión empezó bastante bien, al menos de forma prudente como para pensar que era factible pasar a Q3 sin problemas.
En la Q2 las cosas se complicaron. Una sesión en principio "de mero trámite" (que nunca es así, pero es una manera de hablar) se complicó mucho cuando se juntaron dos factores clave: el incidente de Adrian Sutil terminando Eau Rouge, que provocó una bandera roja en el momento justo en que podía empezar a llover. Parecía un desastre.
La Q3 fue peor. Las condiciones de la pista, más el tráfico, más el conocido problema a la hora de calentar los neumáticos han dejado a Alonso en octava posición por detrás de Felipe Massa, Nico Rosberg, Jaime Alguersuari y Bruno Senna. A priori un desastre, pero habrá que ver cómo se gestiona mañana la carrera, y en qué condiciones meteorológicas.
En principio y en condiciones de seco no hay motivos para pensar en que el de Ferrari no pueda adelantar a Senna y Massa en las primeras vueltas, pero la desventaja inicial de salir octavo puede ser determinante y, sobre todo, como haya condiciones variables no sabemos, ni nos atrevemos a aventurar, cómo será mañana el trabajo en pista. Toda una lotería, con todas las letras.
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