Inaugurados el mismo año (2004), Shanghai y Sakhir se suceden en el calendario 2013, por lo que la Fórmula 1 aterriza esta semana, no sin polémica por segundo año consecutivo, en Baréin. ¿Pero qué sería de la Fórmula 1 sin polémicas totalmente extradeportivas?
La enésima obra de Tilke se diferencia del resto de los circuitos del diseñador alemán por la escasez de curvas de alta exigencia aerodinámica, siendo los puntos más críticos la zona que va de la curva 4 a la 8 y las curvas once, doce y trece, que rompen así con la monotonía de largas rectas y fuertes frenadas que se suceden en Sakhir.
En Baréin tenemos una vez más dos zonas de DRS situadas en las rectas de meta y contrameta. Las zonas de detección estarán situadas justo antes de sus curvas de entrada. Sin embargo, es probable que veamos muchos de los adelantamientos camino de la curva cuatro, donde sin embargo el DRS no podrá ser utilizado.
En lo que respecta a lo que más a inquieta a pilotos y equipos, los neumáticos, Pirelli nos ha sorprendido con un cambio de última hora, pues
llevará finalmente a Sakhir sus compuestos más duros (medio y duro), en lugar de blando y duro como anunció en enero.
Sobre la climatología poco podemos comentar: para la anécdota queda que ha llovido esta semana en Baréin, pero desde luego nadie espera que caiga una sola gota de agua en todo el fin de semana de Gran Premio, encontrándonos así con las temperaturas más altas de lo que llevamos de temporada.
Vía | Formula1.com, FIA, Brembo, Pirelli, Weather.com
En Motorpasión F1 | Gran Premio Baréin Fórmula 1