El actual Pacto de la Concordia vence a finales de 2012. Para entonces, todos los contratos de los equipos con CVC, dueña de los derechos de la Fórmula 1, llegan a su fin. El acuerdo vigente actualmente cubre el periodo 2008-2012, lo que implica que el 31 de diciembre de 2012 las escuderías serán libres de negociar su futuro.
Como viene siendo habitual cuando el contrato se aproxima a su conclusión, Luca Cordero di Montezemolo aprovecha para meter baza y defender sus intereses. En el pasado ya se acordó que la Scuderia recibiría un trato especial a cambio de firmar el Pacto de la Concordia, algo que no les desagradó en absoluto.
Si la memoria no me falla, en el pasado ya gozaron del privilegio de ser los que más dinero recibían en el anterior acuerdo firmado, además de ser los únicos con derecho de veto. El mandamás de Ferrari querrá seguir manteniendo ciertos privilegios en el futuro, por lo que se está empezando a allanar el terreno lanzando darditos envenenados:
Creo que tenemos que ser muy prágmaticos. Al final de 2012 los contratos de todas y cada una de las escuderías con CVC llegarán a su conclusión. Así que tenemos tres alternativas. Renovamos con CVC, o, tal y como hicieron los equipos de baloncesto de EEUU con gran éxito, creamos nuestra propia compañía, como la NBA. Organizaríamos las carreras, tendríamos los derechos de la televisión y todo eso. La tercera posibilidad es buscar un socio diferente. Bernie Ecclestone ha hecho un gran trabajo, pero ha vendido sus participaciones y ya no es el dueño del negocio, sino CVC. Al final todo quedará en manos de los equipos.
Montezemolo fue muy claro al comentar como se presenta el panorama a corto plazo:
A finales de 2012 vence el actual contrato, así que CVC no tendría nada. Pienso que es importante que tengamos alternativas. Ya veremos. Tenemos tiempo por delante.
Nada nuevo bajo el sol. Luca Cordero di Montezemolo viene cada cierto tiempo con la misma cantinela para sacar la máxima tajada posible en la renovación del Pacto de la Concordia. Ferrari quiere el trozo más grande del pastel. En el pasado ya le dio sus frutos, así que no es de extrañar que vuelva a repetir jugada.
Vía | ESPN F1