Sin ningún lugar a dudas, Giancarlo Fisichella es el piloto del momento. Su pole en Spa-Francorchamps, su segundo puesta en la carrera y los rumores sobre la posibilidad de subirse a un Ferrari en sustitución de Luca Badoer le pusieron en boca de todos.
Tras una semana de intensos rumores en los que cada día se colocaba a un piloto distinto en el asiento del segundo Ferrari, la propia escudería se ha encargado de disipar la duda. El italiano ha sido el escogido. Quizás la solución más sencilla. Mucho más que intentar lograr la cesión de Fernando Alonso (alguien se creía que había oportunidades de esto) o de Robert Kubica.
Aunque no tenga el caché que español y polaco, con la llegada de Fisichella, Ferrari consigue a un piloto en forma, y que ya se le ha podido ver en el podio y arriba con un coche no puntero. Así que si las cuentas no fallan, con un F60, al italiano deberíamos verlo entre los diez primeros regularmente. Pero sabemos por experiencia, que a Fisico los buenos trajes le quedan grandes. En el pasado, con un Renault ganador, fue incapaz de seguir el ritmo de Alonso. Pero bueno, eso fue hace tiempo. Fisichella ha madurado y ahora podría vivir una segunda juventud en Ferrari. Primer examen, Monza.
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